Presentan libro ‘Javier Valdez: el Bato’ en la CDMX

A seis años del asesinato de Javier Valdez, se llevó a cabo en la Ciudad de México, la presentación del libro Javier Valdez: El Bato, en la que participaron la periodista Carmen Aristegui y el escritor Diego Enrique Osorno como comentaristas, e Ismael Bojórquez, director de Ríodoce, como moderador.

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El libro retrata, a través de la mirada de sus amigos, familiares y colegas, de forma diversa la multifacética vida del periodista, las mil formas de recordarlo y el sin fin de sentimientos trastocados en torno al acontecimiento del mediodía de aquel 15 de mayo del 2017.

“La idea era hacer un gran perfil del bato, reunir todo lo que se pudiera respecto a Javier en términos de trabajo profesional, como padre, hijo, hermano, escritor, cronista, luchador social y como activista”, comentó Ismael.

Las historias que narró Javier, señaló Carmen, cuentan sobre un mundo complejo marcado por el crimen organizado y el narcotráfico, pero explicados desde la mirada particular de todas esas mujeres, hombres y jóvenes que lo padecieron.

“Ese es el gran mérito de Javier, investigar, saber, adentrarse, meterse al inframundo y contarle a los demás”, señaló Aristegui.

A su vez, durante la presentación, surgieron incógnitas alrededor del quehacer periodístico en América Latina, así como los avances y deterioros del tejido social y legal en México, la crisis económica de los medios y, con todo ello, la disminución del interés de los jóvenes por estudiar periodismo; por esta razón refrendaron la importancia de rememorar al periodista y convertirlo en fuente de inspiración para muchos, en empuje y en motor para seguir adelante.

“Creo que acercarse a la figura de Javier y de lo que él hizo a lo largo de su vida, lo que dejó escrito, lo que heredó, de la manera en que encaró tan humanamente, tan valientemente, se vuelve un referente necesario para estos tiempos oscuros y pesimistas para ser periodista; el legado de Javier, la obra de Javier, eso va a seguir viviendo y eso también es importante”, comentó Diego Enrique Osorno.

Ante la pregunta de si México ha cambiado en estos seis años sin Javier Valdez, los presentadores coincidieron en que esa realidad no es muy diferente a la actual y que al respecto, esa interrogante esconde un tema común para los periodistas de algunos países de América Latina, sobre las formas de eliminación de los periodistas desde el sentido de credibilidad por parte de algunos gobiernos.

“Estamos hablando, hoy, de que hay elementos que inhiben la libertad de expresión y de prensa. (…) Un modelo político que se repite en otros países y que ha encontrado redituable colocar a la prensa y a los periodistas como adversarios, enemigos y un factor a desacreditar permanentemente”, indicó Aristegui.

Ante este panorama, se planteó la discusión sobre qué pasaría con las democracias si los periodistas no existiesen o si existiesen debilitados. Es por ello que Carmen Aristegui puntualizó que el primer y gran tema es la impunidad y el colapso del sistema de justicia en relación con los casos de periodistas y en relación a todos los demás casos.

No al silencio

En marzo de 2017, meses antes de ser asesinado, Javier Valdez se unió a una protesta realizada en Culiacán por la muerte de la periodista mexicana Miroslava Breach, corresponsal del diario La Jornada, colaboradora del periódico El Norte de Chihuahua, asesinada al salir de su casa en Chihuahua. En una cartulina, el periodista escribió: “Lo peor es el silencio; ni un periodista más asesinado”.

Es por eso que, según retoma Ismael, el propósito esencial del libro es mantener viva la memoria de Javier y exponer de forma nítida los contextos que se viven en cada región del continente.

“El día que nosotros dejemos de escribir, de pensar, de protestar, ese día ellos habrán ganado y me refiero a ellos no sólo al poder formal sino también a los poderes fácticos, al crimen organizado”, destacó Ismael.

Según el último informe de Artículo 19, al término del 2022 hubo 12 periodistas asesinados y una larga lista de agresiones documentadas; al respecto se cuestionó sobre las maneras de organización y acompañamiento por parte de la sociedad a lo que Diego Enrique señaló que las organizaciones de periodistas y las alianzas con organizaciones civiles que hoy más que nunca, son vitales para enfrentar la situación y eso implica abrirse a espacios de la sociedad civil que tengan una acreditación y que, al igual que los periodistas dispongan de una lucha legítima.

El camino hacia la justicia, las historias inmortalizadas, traer a colación los temas en cuestión de seguridad, impulsar el gusto a ser críticos de la realidad en la que cohabitamos y ser un referente que motive a quienes deseen ejercer el periodismo, son los legados y los propósitos implícitos de retener la memoria de Javier Valdez.

Como precisó Ismael Bojórquez casi al término de la presentación: “uno de los peores enemigos que tenemos los ciudadanos, es el olvido”.

Artículo publicado el 21 de mayo de 2023 en la edición 1060 del semanario Ríodoce.