No es que sea más grave, pero hay que seguir con las precauciones, advierten expertos

El virus SARS-CoV-2 continúa mutando. La nueva subvariante comenzó a propagarse ya en México, en donde al corte se estiman al menos 17 casos. El nombre lo toman de un personaje de la mitología griega, cerbero o “perro del infierno”.

Sin embargo el nombre científico es BQ1.1, la cual es una subvariante más de Ómicron y que en las próximas semanas se convierta en la predominante. Pero esto no significa lo peor, el hecho de que una variante desplace a otra no es sinónimo de hacer daño sino de transmisibilidad, es decir, “cerbero” es más fácil de adquirir.

La anterior subvariante que predominaba, la BA.5, poco a poco está siendo desplazada por esta nueva variante. Se espera que cerbero o “perro del infierno”, según el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades, sea la más transmisible.

Al respecto, el investigador sinaloense, Cristóbal Cháidez Quiroz, explicó sobre el virus que si bien ha tenido una baja en el país, la nueva variante podría llegar a desplazar a las anteriores.

“En México se han reportado algunos casos, ya la tenemos en México esa variante, y bueno, las variantes de manera general van desplazando a otra por su capacidad de transmisión, no tanto por la capacidad de hacer daño; entonces se espera que en las últimas semanas o meses la variante dominante sea esa”, comentó.

“Va a producir los mismos síntomas que las anteriores, dolor de garganta, tos, malestar general, fatiga, pérdida de voz, diarrea y obviamente congestiones nasales, fiebres y posibles secuelas para personas que no están vacunadas, es importante destacar esa parte”, añadió.

El Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades explica que para principios de 2023 se espera que más del 80 por ciento de los casos de SARS-CoV-2 se deban a BQ.1/BQ.1.1. Dos variantes que proceden de BA.5 una de las subvariantes de Ómicron, las dos proceden de BA.5, una de las subvariantes de esta.

Y aunque tienen mucha más capacidad para evadir los anticuerpos generados por la infección previa o la vacuna, expertos del organismo explican que no hay evidencia de que BQ.1 se asocie con una mayor gravedad de la infección.

En ese sentido, Cristóbal Cháidez Quiroz, investigador especialista en microbiología ambiental y director del Laboratorio Nacional para la Investigación en Inocuidad Alimentaria (Laniia), explicó que al momento las vacunas han mostrado eficacia para disminuir síntomas.

“Esta variante, al menos hasta ahora, está respondiendo bien las vacunas que se están aplicando y seguramente en los últimos meses tendremos una nueva vacuna que estará llegando a México”, dijo.

“También es importante destacar que las medidas que siempre hemos platicado, las medidas básicas se deben de seguir implementando sobre todo en lugares cerrados, en esta época de invierno sí es recomendable que se sigan usando cubrebocas, se mantenga el distanciamiento y pues el lavado frecuente de manos, así como incluir que las personas se tienen que seguir vacunando”, añadió.

Sin embargo el riesgo más grande al que la salud pública en general se enfrenta actualmente no se encuentra únicamente en esta nueva subvariante de Ómicron, sino en una triple amenaza, producto de las climáticas actuales.

“Algo que es importante mencionar, más allá de esta variante, la BQ1.1 o cerbero o ‘perro del infierno’, es la situación que estamos viviendo en estos momentos de la cepa de tres tipos de virus que están causando enfermedades respiratorias, la de COVID-19, la de influenza y la del virus sincitial, son tres infecciones que se están desarrollando al mismo tiempo y que las personas pueden estar teniendo estos mismos cuadros”, manifestó.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó sobre el incremento de casos de estas tres enfermedades durante la actual estación, afectando sobre todo a infantes, especialmente a aquellos menores a un año.

En los adultos y en los niños mayores y sanos, los síntomas del virus sincitial (VSR por sus siglas en inglés) se parecen al resfriado común y sus síntomas prevalecen leves.

Sin embargo el VSR puede ser causa de una infección grave en bebés de 12 meses y más jóvenes, especialmente los prematuros, así como en los adultos mayores, y gente con un sistema inmunitario débil. Por eso las medidas de cuidado deben continuar.

“Para las primeras (COVID-19 e influenza) dos hay vacunas mientras que para el otro no, por lo que las medidas básicas de cuidados deberían mantenerse”, añade Cristóbal Cháidez.

Artículo publicado el 20 de noviembre de 2022 en la edición 1034 del semanario Ríodoce.