Un juez de distrito dictó auto de formal prisión al empresario Gerardo de Nicolás Gutiérrez por el presunto desfalco de 456 millones de pesos a Bancomext, igual que su hermano Eustaquio, detenido desde el 28 de abril.

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Gerardo lleva el proceso penal en libertad debido a que tiene una suspensión de la orden de aprehensión concedida por el Juzgado Cuarto de Distrito con sede en Culiacán, en un juicio de amparo.

Tras la detención de Eustaquio, su otro hermano, José Ignacio promovió un juicio de amparo contra la posible orden de aprehensión en su contra, pero se sobreseyó debido a que no tiene mandamiento judicial.

Los hermanos Eustaquio y Gerardo De Nicolás Gutiérrez están acusados del delito de violación a la Ley de Instituciones de Crédito.

El 4 de mayo de este año, el juez quinto de distrito de procesos penales Federales dictó auto de formal prisión contra Eustaquio, quien quedó detenido en el reclusorio, pero luego obtuvo prisión domiciliaria y ahora busca un amparo para poder salir del domicilio a citas médicas y de negocios.

El 8 de julio, Gerardo presentó una demanda de amparo contra la “orden de aprehensión que ha librado en mi contra, derivada de la causa penal número 98/2022. Cualquier acto habido y por haber tendiente a ejecutar la orden de aprehensión librada”.

El juez de distrito concedió una suspensión definitiva el 18 de agosto por lo que la orden de aprehensión no podía ser ejecutada hasta que se resolviera el juicio de amparo.

El juez condicionó la suspensión y Gerardo debía depositar una garantía económica de 500 mil pesos y comparecer ante el juez que lo requería en la causa penal.

La fianza fue depositada en el Banco del Ahorro Nacional pero no acudió ante el juez.

De Nicolás justificó que el 21 de agosto fue diagnosticado con Covid-19, por lo que, tras ser valorado, el médico tratante ordenó 10 días de estricto aislamiento en su domicilio.

Para acreditar que estaba enfermo presentó copias certificadas de diversas constancias médicas.

El 25 de agosto solicitó al juez una prórroga para presentarse a rendir su declaración preparatoria y le fue concedida.

“Agréguese a los autos el escrito de cuenta signado por el quejoso Gerardo de Nicolás Gutiérrez, mediante el cual realiza diversas manifestaciones y sustancialmente se advierte que solicita una prórroga para efectos de comparecer ante el juez responsable a rendir su declaración preparatoria, ello con el fin de cumplir con uno de los requisitos que se estableció en la resolución incidental de 17 de agosto de este año”, ordenó el juez.

Señaló que “ante lo expuesto, se considera prudente otorgar una prórroga de trece días naturales, contados a partir del día siguiente en que surta efectos la notificación del presente acuerdo, a fin de que la parte quejosa comparezca ante el juez responsable a rendir su declaración preparatoria en relación con los hechos delictivos que se le imputan y exhibir ante este juzgado en igual término constancia que acredite tal presentación”.

Para que rindiera su declaración preparatoria, el juzgado quinto con sede en la Ciudad de México pidió al juzgado primero ubicado en Culiacán para que lo auxiliara y tomara la declaración preparatoria de Gerardo el 7 de septiembre.

Después de rendir su declaración, el 13 de septiembre, el juez quinto dictó de formal prisión en su contra.

Ese día los abogados de Gerardo notificaron al juez de amparo que había cumplido con ponerse a disposición del juez quinto y rendir su

declaración preparatoria y el apoderado legal de Bancomex solicitó al juzgador ordenara la detención debido a que el delito está considerado como grave.

El juez negó ordenar la detención debido a que de acuerdo con la Constitución es “un delito que no implica prisión preventiva oficiosa. De ahí que, en atención a dichas manifestaciones por parte del Juez responsable, en suspensión definitiva 17 de agosto de 2022, se concedió al quejoso dicha medida cautelar a efecto de que no se aprehenda al quejoso y que el mismo quede a disposición en cuanto a su libertad a disposición de este órgano jurisdiccional. Por lo anterior, es que no ha lugar a proveer de conformidad con lo solicitado por el apoderado de la parte tercero interesada”.

Las órdenes de aprehensión contra los hermanos De Nicolás Gutiérrez derivan de la averiguación previa UEIDFF/FINM19/294/2014, por violaciones a la Ley de Instituciones de Crédito, en el artículo 112, fracción cuarta.

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La fracción cuarta señala que se sancionará a “los deudores que no destinen el importe del crédito a los fines pactados, y como consecuencia de ello resulte quebranto o perjuicio patrimonial a la institución” y establece una pena de prisión de 8 a 15 años de prisión y una multa de 250 mil a 350 mil días de salario.

De acuerdo con la acusación, en 2012 el Banco Nacional de Comercio Exterior otorgó a Desarrolladora Homex un crédito por 456 millones 743 mil pesos.

Los hermanos De Nicolás presuntamente usaron el dinero con fines distintos para los que solicitaron el préstamo.

Eustaquio fue detenido en el aeropuerto de Guadalajara cuando regresaba de Madrid, España.

Tras ser vinculado a proceso penal quedó internado en el reclusorio Oriente de la Ciudad de México.

En octubre pasado, el juez sustituyó la prisión preventiva justificada por la prisión domiciliaria que cumple en un departamento de San Jerónimo, en la colonia Tizapán, en la Ciudad de México.

El empresario está vigilado por dos agentes federales durante las 24 horas del día y no puede salir del país sin autorización judicial y sólo podrá abandonar la prisión domiciliaria para asistir a las diligencias de su proceso penal.

El 26 de octubre, Eustaquio promovió un amparo para que se le permita salir del domicilio a citas y negociar un acuerdo reparatorio.

“Se solicita que se mantenga así y no se le prive de su libertad, sin embargo se le permita, incluso con resguardo policial, acudir a diversas citas médicas, de trabajo y a efecto de negociar un posible acuerdo reparatorio”, señala el documento presentado al juez.

El amparo para que pueda salir del domicilio no ha sido resuelto por el juez.

Artículo publicado el 06 de noviembre de 2022 en la edición 1032 del semanario Ríodoce.