Durante el Grito de Independencia en el Zócalo de la Ciudad de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador sorprendió con tres arengas: ¡Muera la corrupción, muera el clasismo y muera el racismo!”.
Además lanzó 20 “vivas” que comenzaron con la independencia, Miguel Hidalgo y Costilla, Josefa Ortiz de Domínguez, Ignacio Allende, Leona Vicario, José María Morelos y Pavón, Vicente Guerrero y los héroes anónimos.
La arenga continuó con la libertad, la igualdad, la justicia, la democracia, nuestra soberanía, la fraternidad mundial y la paz.
“Mexicanas, mexicanos
¡Viva la Independencia!
¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla!
¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!
¡Viva Ignacio Allende!
¡Viva Leona Vicario!
¡Viva José María Morelos y Pavón!
¡Viva Vicente Guerrero!
¡Vivan los héroes anónimos!
¡Viva la libertad!
¡Viva la igualdad!
¡Viva la justicia!
¡Viva la democracia!
¡Viva nuestra soberanía!
¡Viva la fraternidad universal!
¡Viva la paz!
Mexicanas, mexicanos
¡Muera la corrupción!
¡Muera el clasismo!
¡Muera el racismo!
¡Vivan los pueblos indígenas!
¡Viva la grandeza cultural de México!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!”
Acto seguido, la pareja presidencial fue acompañada por sus invitados de honor: los expresidentes José Mújica, de Uruguay, y Evo Morales, de Bolivia; Aleida Guevara, hija de “El Ché“; así como John y Gabriel Shipton, padre y hermano de Julian Assange. Quienes compartieron balcón con los secretarios de Marina y Defensa Nacional.
Acompañado por su esposa, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, el presidente no ondeó la bandera de México y regresó al balcón para el espectáculo pirotécnico, ante un aproximado de 130 mil asistentes.
El mandatario federal esperó la canción que le dedicaron Los Tigres del Norte: “Somos más americanos”.
“Quiero recordarle al gringo: Yo no crucé la frontera, la frontera me cruzó”, repitió el presidente para acompañar la canción del grupo musical.
Gutiérrez Müller alentó al presidente a cantar y moverse al ritmo de la música mientras lo tomaba del brazo.
“Entre guerreros valientes, indios de dos continentes, mezclados”, fue otro de los fragmentos que el presidente entonó.
Enseguida, Los Tigres del Norte tocaron “La puerta negra” y a menos de media canción el presidente López Obrador se despidió de los mexicanos, se metió al Palacio Nacional y el espectáculo continuó.