Legisladores de Sinaloa, Chihuahua y Durango, celebraron ayer viernes un encuentro, en la convergencia de esos estados, denominado “por la dignidad y el bienestar social” de la región conocida como el “Triángulo Dorado”.
A finales de mayo el presidente López Obrador durante una de sus giras propuso por vez primera cambiar el apodo por el cual la zona es conocida a nivel internacional.
“No me gusta, me molesta que le llamen el Triángulo Dorado”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador el viernes 27 de mayo.
En su discurso el presidente insistió en cambiar el mote a la zona límite entre Sinaloa, Durango y Chihuahua por el del “Triángulo de la gente buena y trabajadora”.
Los legisladores insistieron en reconocer esta región, a propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, como el “Triángulo de la Bondad” y se comprometieron a producir un manifiesto para atender los temas de carácter social, económico y cultural, así como los reclamos de educación y salud de las mujeres, hombres, niñas y niños de esta zona.
Por Sinaloa asistieron el diputado Feliciano Castro Meléndrez, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, César Ismael Guerrero Alarcón y la diputada Luz Verónica Avilés Rochín; de Durango estuvo presente el legislador Cristian Alán Jean y de Chihuahua los legisladores Noel Chávez y David Óscar Castrejón.
El diputado Feliciano Castro Meléndrez explicó en su mensaje que este triángulo de Sinaloa, Chihuahua y Durango, donde confluyen riscos y pinos, es una región de gente buena, de gente trabajadora y honesta.
“A esta tierra debemos llamarle el Triángulo de la Bondad, el triángulo de la gente buena dedicada al trabajo, y así será”.