Por dificultades con proveedores para adquirir ventiladores de respiración asistida que serían donados a hospitales, la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado decidió reorientar la inversión a la compra de insumos para proteger a médicos que atienden a pacientes con Covid-19.
Los diputados habían establecido un contrato con un proveedor de ventiladores que se había comprometido a entregarlo el pasado 4 de mayo, pero se incumplió con la fecha pactada.
A través de un comunicado del Poder Legislativo, se informó que de continuar el proceso de comprar, el Congreso del Estado recibiría el equipo los primeros días de junio, entre los tiempos de entrega y los trámites aduanales, por lo que los diputados en acuerdo mutuo con el proveedor decidieron cancelar el contrato.
Los diputados informaron que siguieron buscando ventiladores con otros proveedores, pero los equipos encontrados no cumplían con las características que solicitaba el sector salud.
Ante la dificultad para obtener a tiempo los ventiladores, ya que éste equipo ha sido acaparado por muchos países que enfrentan también la emergencia sanitaria por Covid-19, el Congreso del Estado acordó redireccionar la bolsa de 7 millones 760 mil pesos para la compra de insumos más necesarios y urgentes de los hospitales públicos de Sinaloa.
Los recursos que ahora serán destinados a insumos médicos provienen de economías que generó el Congreso del Estado en los primeros tres meses del año, como parte del plan de austeridad aplicado durante la presente Legislatura, donación de los diputados del fondo de gestión social y presupuesto que había sido planeado para la contratación de secretarios técnicos parlamentarios.
Por acuerdo de la JUCOPO, los ventiladores serían adquiridos por el Congreso del Estado y donados a hospitales integrales de Sinaloa que operar en las zonas rurales.