Gobiernos federal y estatal violaron leyes y decretos para iluminar la Isla de Venados y “darle luz” al Tianguis Turístico

La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) otorgó al Gobierno del Estado de Sinaloa la autorización para iluminar la Isla de Venados, en Mazatlán en medio de irregularidades.

La riqueza de flora y fauna llevaron a las autoridades, en 1978, a declarar la Isla de Venados, como área natural protegida por Decreto Presidencial, mientras que la UNESCO la declaró Patrimonio Natural de la Humanidad en 2005.

Pese a que dichos decretos establecen la restricción de volver a colocar luminarias, el Gobierno del Estado obtuvo una autorización irregularmente de la Conanp, explicó Joel Bojórquez Sauceda, profesor investigador de la Facultad de Ciencias del Mar.

—¿Quien violó la ley? ¿la Conanp al haber autorizado?

—Sí, porque además la Conanp requiere de una consulta para emitir la opinión favorable— dijo.

El proyecto de mantener iluminada la isla durante cuatro días, —que terminaron siendo cinco— durante el Tianguis Turístico, movió al colectivo Mazatlán Consciente, ECOS. A.C. Colectivo Revueltas, A. C, Fundación Biósfera, Grupo de los CIEN, Fuego Verde, el Cemaz, catedráticos de la Facimar y ciudadanía en general.

Y es que en la solicitud, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Obras Públicas, pidió que fuera por seis meses.

Esta situación originó que los ambientalistas, asesorados por el abogado Jesús Salazar, presentaran una demanda de amparo el 9 de abril, tres días después un juez federal emitió una orden de suspensión del proyecto de iluminación, pero el Gobierno del Estado hizo caso omiso.

“Las autoridades tienen 15 días (hábiles) a partir de que se les notifica, para rendir un informe justificado sobre los actos que se le reclaman”, explicó.

Hasta el momento el que ya respondió fue el Ayuntamiento de Mazatlán, en el sentido de que no es promovente de la obra, y se está a la espera de que el Gobierno del Estado y la Conanp lo hagan.

Se estima que sería durante la primera semana de mayo cuando las instituciones involucradas respondan y demuestren que sus actos no son inconstitucionales, indicó.

Agregó que durante los días que se encendieron las luces, especialistas recabaron información en la isla.

Se capturaron fotos y videos de la obra, la utilización de las lámparas, mencionó, al igual que la inasistencia de personal que vigilara que se cumplieran las condicionantes.

“No nos consta que hayan ido, si ellos dicen que fueron, que lo demuestren con un acta”, expuso el abogado.

Por su parte, Bojórquez Sauceda, detalló que de origen, la solicitud del Gobierno del Estado está plagada de irregularidades y mentiras.

De acuerdo a la solicitud del estado, fechada el 27 de mayo con número de oficio SGPA/DGIRA/DG/02244, la petición es la “Rehabilitación de cinco luminarias solares Led en la Isla de Venados”.

Bojórquez Sauceda señaló que el argumento falaz de “rehabilitar” algo inexistente en la actualidad, tuvo su origen en las lámparas que hace 49 años fueron colocadas sobre el cerro, y de las que ya no existe ningún indicio.

Ni siquiera existía la Ley General de Equilibrio Ecológico (Legeepa), pero lo solicitan de esa manera y además que se les exente de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).

“Legalmente debió de haber procedido que presentaran el MIA para una obra nueva, pero como el Plan de Manejo del Golfo de California, no lo permite construir infraestructura aunque sea temporal, a menos que sea con fines de investigación ecológica, no podrían hacerlo.

El profesor, que además es especialista en manejo de recursos naturales, señaló que las lámparas tampoco fueron colocadas en las coordenadas que indicó el Gobierno del Estado que lo haría en su solicitud.

“Las coordenadas no corresponden a las colocadas hace 49 años, porque las que ya estaban, las ubicaron arriba del cerro y ellos (Gobierno del Estado) las pusieron en la playa y sobre la playa no había ninguna, entonces, no hay rehabilitación”, indicó.

‘Evitar tráfico de drogas’, uno de los argumentos

Para que le fuera autorizada la solicitud, el gobierno de Sinaloa argumentó que la colocación de las lámparas tenía como fin evitar actos de sustracción de la flora y fauna presente en la Isla de Venados e incendios.

Así mismo, “generar un sentido de conservación de la misma al enaltecer el patrimonio natural de la zona, ya que se pretende resaltar la volumetría de las áreas de vegetación de matorral y pastizal generada por el relieve existente, evitar el tráfico de drogas, entre otros”.

Bojórquez Sauceda cuestionó éste último argumento toda vez que tampoco presentaron un reporte en el que se indique cuántos narcotraficantes fueron capturados durante los días que mantuvieron las luces encendidas.

Calificó de absurdo ese argumento ya que no se dieron a conocer antecedentes de esos supuestos eventos que pretendían disuadir con la iluminación.

Consultadas, respecto a que si existían antecedentes que en alguna de las tres islas hubieran sido utilizadas para el tráfico de drogas, fuentes federales aseguraron no contar con registro de esos eventos.

Esta autorización, fue solicitada para iluminar durante cinco horas al día, de 19:00 a 00:00 horas, durante seis meses.

En la exposición de motivos, se indicó que con el proyecto de colocación de las luminarias no habría remoción de suelo, ni modificación de la cubierta vegetal, ya que serían colocadas en el mismo sitio donde se ubican las bases de las luminarias instaladas desde 1969 en una zona cubierta por arena y rocosa.

Incumplen las 11 condicionantes

En la autorización emitida por la Conanp, señaló que el Gobierno del Estado había omitido indicar que Isla de Venados forma parte del Área Natural Protegida de jurisdicción federal establecida el 2 de agosto de 1978 que es el Área de Protección de Flora y Fauna Islas Golfo de California.

Otra omisión en la que incurrió el promovente de la obra es que la isla constituye una de las 244 islas que forman parte del Sitio de Patrimonio Mundial Islas y Áreas Protegidas del Golfo de California, y la existencia  del Programa de Manejo de esta área natural protegida publicado en el Diario Oficial de la Federación el 17 de abril de 2001.

Igualmente señalaron que, de acuerdo al mapa de la cuenca visual, el proyecto incidiría con la iluminación a la Isla Pájaros y Lobos que se encuentra a 1.2 kilómetros la primera y adyacente la segunda.

En su solicitud, las autoridades estatales omitieron, en la identificación de impactos potenciales, la etapa de operación.

La Conanp advirtió que, a la solicitud de rehabilitación del proyecto de hace 49 años, le sucedieron acciones para su conservación como decretos de protección y manejo, regulación de prestadores de servicios turísticos, así como el retiro de postes e infraestructura abandonada que se utilizó en la iluminación hasta 1975 cuando fue destruida por el huracán “Olivia”.

La Conanp expuso además los efectos de luces artificiales en aves como las dos parejas de Ostrero americano, especie en peligro de extinción. Indicó que la exposición prolongada de luz artificial nocturna, incrementa la atracción de aves y por ende, causar efectos adversos como colisiones y mortandad.

Con todo y la detallada lista de observaciones emitidas, la Conanp determinó que el proyecto podría ser considerado compatible, criterio que desde el punto de vista de los especialistas, es falso.

En su opinión técnica, la Conanp emitió 11 recomendaciones que el Gobierno del Estado ignoró, señaló Bojórquez Sauceda.

Finalmente el profesor indicó que le tomarán la palabra al alcalde Joel Boucieguez quien los conminó a participar en los proyectos futuros de la ciudad para ser vigilantes y opinen al respecto.

“No nos oponemos a ningún proyecto, al contrario, pero seremos vigilantes de que se cumpla con la legislación ambiental”, dijo.

En los próximos días solicitarán por escrito que esa participación se formalice de manera oficial.

Artículo publicado el 29 de abril de 2018 en la edición 796 del semanario Ríodoce.