Durante décadas, la comunidad científica ha llamado la atención del gobierno mexicano, alertando por la principal amenaza para la vaquita: la captura incidental en redes de pesca. Lamentablemente, se han hecho de oídos sordos y las medidas definitivas para revertir el proceso de extinción de esta especie única en el mundo no han llegado.

Quedan 97 vaquitas marinas viviendo en el Golfo de California y debemos defenderlas para evitar su desaparición. La vaquita marina es una especie de marsopa, similar a un pequeño delfín, que debido a la pesca destructiva y la falta de control por parte de las autoridades, está en peligro de desaparecer.

Los científicos estiman que, si no tomamos medidas para protegerla, en sólo 3 años se extinguirá.

Ayúdanos a salvar a la vaquita marina. Exige a Enrique Peña Nieto que tome acciones urgentes, prohíba todo tipo de pesca que pueda afectarla y declare reserva marina a toda la zona en la que habita. Alcemos la voz una vez más y defendamos esta especie endémica de nuestro país.

Al firmar la petición de Greenpeace mandarás un mail como este al presidente Enrique Peña:

Distinguido Presidente de México Peña Nieto.

Como Usted debe saber, se estima que sólo quedan menos de 100 vaquitas marinas, y que de no tomarse medidas drásticas en el corto plazo, para 2018 la especie estaría extinta, lo cual recae dentro de su período como responsable del Gobierno de México.

Las razones que han llevado a este pequeño cetáceo, endémico de México, al borde de la extinción ha sido la falta de un manejo de pesca apropiado, y la falta de controles eficientes y transparentes por parte del Estado.

De no tomarse medidas urgentes, el impacto no será sólo sobre la vaquita marina, sino sobre otras especies, y también afectará a la industria pesquera de México por la condena de la comunidad internacional.

Por ello solicitamos de manera urgente que se implementen las medidas necesarias para salvar a la especie:

-Prohibición indefinida de todo tipo de pesca que pueda afectar a la vaquita, en toda la zona en que habita, y declaración de la totalidad de la misma como Reserva Marina.

-Eliminación de todo tipo de artes de pesca que impliquen riesgos para la vaquita, no solo en el agua, sino también en las costas.

-Implementación y control efectivo de estas medidas.

-Coordinar con los gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica y China para detener el transporte y el comercio de productos de especies que amenacen el futuro de la vaquita, y su consumo, (tal el caso del tráfico ilegal del pez Totoaba, también críticamente amenazado de extinción).

-Un plan de adaptación a las comunidades pesqueras afectadas a prácticas no destructivas y sostenibles como medio de vida.

En sus manos está el futuro de la vaquita. No queda más tiempo que perder!

Atentamente,

Se necesitan 450 000 firmas, hasta el momento del cierre de esta edición se contabilizaban 336 332.