Malayerba: Sin balas

Piloto y navegante solo ven los fogonazos: son como destellos, luces rojas que se pierden rápidamente, fuego intenso que emerge de entre los matorrales de mariguana y amapola. Pero no hay ruido ni siluetas. Era una cañada honda y accidentada. Un plantío tupido los esperaba. El helicóptero, un Bell 212, asediaba la zona. Las plantas […]