Malayerba: Atole

Dos de la mañana. Don Ricardo caminaba apaciblemente por la banqueta de esa amplia avenida, en la colonia Tierra Blanca, rumbo al trabajo. La oscuridad de la madrugada era su compañera, su cómplice. Escuchó unos gritos y se le erizó el cabello. Luego un silencio profundo. Y después otros gritos de mujer, llanto. La voz […]