El ex secretario de Seguridad de México fue declarado culpable y será sentenciado en octubre
El presidente Andrés Manuel López Obrador fue nuevamente señalado de tener nexos con narcotraficantes. Según afirma el ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna en una carta escrita con su puño y letra, Estados Unidos tiene pruebas sobre la relación que el mandatario mexicano tiene, junto con otros integrantes del partido Morena, con miembros del crimen organizado.
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“Es del conocimiento público y están en los registros oficiales de México y EUA, los contactos. videos, audios, fotografías, registros de comunicación y gestión entre el actual presidente de México,Andrés Manuel López Obrador, y sus operadores con los líderes del narcotráfico y sus familias”, se lee en la carta, dada a conocer por el abogado de García Luna, Cesar De Castro.
La misiva agrega: “Los narcotraficantes que fueron utilizados como testigos en mi contra durante el juicio, quienes, inclusive, imputaron al presidente López Obrador y a sus operadores de estar vinculados con ellos y el narcotráfico, lo cual se corrobora con la reciente captura de Ismael Zambada ´Mayo Zambada´, donde señala los vínculos del actual gobierno con el narcotráfico”.
El único político del partido Morena que Zambada García menciona en la carta es el actual gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, de quien presume López Obrador y lo repite cada que puede, “es su compa”, y a quien inicialmente el partido le brindó su apoyo.
“Pero si lo pide la fiscalía, Rocha Moya debe declarar contra el Mayo”, aclaró el presidente días después.
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Sobre la carta de García Luna, López Obrador respondió el viernes de la semana pasada que, si realmente existe evidencia en su contra, como afirma el ex secretario de seguridad pública, entonces estas deben ser presentadas a la autoridad competente.
“Escriben que hay pruebas, hay videos, hay llamadas, hay audios. Es muy sencillo, que los dé a conocer. Él tiene todo. Por eso es muy importante, y esto es un mensaje, una enseñanza mayor para los jóvenes, es muy importante tener autoridad moral”, dijo López Obrador durante su conferencia de prensa del viernes por la mañana.
García Luna, quien permanece preso en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, en Nueva York, presentó una moción al juez Brian M. Cogan, solicitando un nuevo juicio, pues como agrega en la misma carta, el ex secretario de seguridad pública sostiene su inocencia.
La defensa, liderada por De Castro, apeló la sentencia de culpabilidad en una moción presentada ante la corte hace poco más de un año, pero denegada por el juez Cogan el viernes pasado, al argumentar que la defensa no demostró que hubo anomalías en el proceso judicial y que por tanto los argumentos presentados no eran suficientes para solicitar un nuevo juicio.
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“Se trata de una persecución política y existen pruebas para exonerar a mi defendido”, ha dicho en reiteradas ocasiones Cesar De Castro.
Historia de un fracaso
La carta enviada por García Luna puede ser vista como un nuevo intento para demostrar su inocencia en lo que sería un nuevo juicio, y su principal argumento fue que, haciendo de lado a los testigos protegidos que testificaron en su contra, la fiscalía estadunidense no presentó prueba alguna sobre enriquecimiento ilícito, ni su aparente involucramiento con el crimen organizado.
“Sin ninguna prueba en mi contra, y con información falsa aportada por el gobierno de México y los testigos criminales, y con la absoluta omisión de los fiscales en no corroborar y veracidad de un solo dato o información aportada por ellos, y aún con la existencia de pruebas aportadas por la defensa que acredita que es falso, se lleva a cabo la sentencia”, dice García Luna en la carta.
La decisión del juez Cogan, sin embargo, confirma el veredicto de culpabilidad de cinco delitos por narcotráfico, delincuencia organizada y falsedad de declaraciones emitidos en febrero del año pasado, por lo que ahora solo queda esperar a que, el próximo 9 de octubre, se emita la pena de la sentencia definitiva, y entonces las esperanzas de García Luna estarán enterradas.
“Es decepcionante la decisión del juez”, dijo De Castro al periodista Keegan Hamilton.
Según la moción, lo que más perjudicó a García Luna fue que ofreciera millones de dólares a otros reos para que testificaran a su favor, incluyendo 500 mil ofrecidos para sobornar a un testigo protegido, pero cuando éste se negó, García Luna aumentó el soborno a 2 millones de dólares.
“Se trató de un plan muy bien orquestado por el acusado para obstruir la justicia, pues, aunque las notas y la grabación no pueden ser más incriminatorias, sin duda es un plan bien orquestado”, señaló Cogan sobre el esquema de sobornos de García Luna.
Según explica el código penal estadunidense, de ser encontrado culpable García Luna podría alcanzar una pena mínima de 25 años de prisión, y una pena máxima de cadena perpetua.
Artículo publicado el 22 de septiembre de 2024 en la edición 1130 del semanario Ríodoce.
