El hijo de Héctor Melesio Cuen Ojeda fue sentado en el banquillo por primera vez la semana anterior
Después de diferir 12 veces la audiencia inicial y evadir una orden de aprehensión, el ex director de Bienes y Suministros de la UAS, Héctor Melesio Cuen Díaz, fue vinculado a proceso por supuestos pagos a un restaurante propiedad de su familia con recursos de la universidad.
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Este es el cuarto proceso penal que enfrenta el hijo de Héctor Melesio Cuen Ojeda, ya que también está involucrado en las compras millonarias sin licitación de carne de res y pollo, tortillas y la contratación de obras de rehabilitación y están pendientes de iniciar otros tres procesos.
Por negociaciones ilícitas Cuen Díaz fue citado por primera vez en octubre de 2023, pero la audiencia se pudo realizar hasta la semana pasada, debido a que las diferían con argumentos de que estaba enfermo o cambiaba de abogados.
En junio de este año un juez libró una orden de aprehensión para que lo llevaran a comparecer por la fuerza y desde entonces estaba prófugo.
La semana pasada el ex funcionario de la UAS se presentó de manera voluntaria en el Centro de Justicia Penal de la Región Centro con una suspensión para no ser detenido y solicitó celebrar la audiencia inicial.
La Fiscalía señaló que cometió el delito de negociaciones ilícitas, en 2021 y 2022, por la adquisición de un servicio de restaurante-bar con servicios de meseros.
De acuerdo con la FGE por medio de empleados de la Universidad realizaban consumos en la empresa Inmobiliaria Luis XV, que es el restaurante Casa María, propiedad de Cuen Díaz y su familia.
Los trabajadores facturaban los consumos y éstos eran pagados por la UAS, donde Cuen Díaz era el director de Bienes y Suministros.
Según la FGE, en 2021 Casa María emitió a nombre de la universidad 170 facturas por un millón 274 mil 80 pesos; y en 2022 fueron 428 facturas por 382 mil 299 pesos.
En total facturaron a la universidad un millón 447 mil 671 pesos en dos años.
Casa María además expidió una factura por un millón 145 mil pesos el 25 de agosto de 2021 y el 20 de mayo de 2023 fue cancelada.
La FGE señaló que la cancelación fue irregular pues ocurrió un año ocho meses después de su expedición y dos días después de que medios de comunicación publicaran que Casa María había cobrado un millón 700 pesos a la UAS.
La fiscalía asegura que la cancelación fue fuera de los plazos legales y para cancelarla tuvo que haber un acuerdo entre funcionarios de la UAS y la empresa, de la que Cuen Díaz es apoderado legal y propietario junto con su familia.
El juez Carlos Alberto Herrera consideró que los datos de prueba que presentó la Fiscalía son suficientes para presumir que cometió el delito de negociaciones ilícitas y dictó el auto de vinculación a proceso.
Como medida cautelar el juez impuso que Cuen Díaz acuda a firmar cada mes y la prohibición de salir del país sin autorización judicial.
Para la FGE dio un plazo de tres meses para que concluya con la investigación.
Cuen Díaz estuvo prófugo de la justicia durante dos meses con una orden de aprehensión.
En junio, una juez ordenó que lo llevaran al tribunal con el uso de la fuerza pública y Cuen Díaz promovió un amparo para no ser detenido.
Un juez federal le concedió una suspensión contra la orden de aprehensión y le dio un plazo de tres días para que de manera voluntaria se presentara ante el juez de control.
Cuen Díaz fue citado en cinco ocasiones y no se presentó con el argumento de que estaba enfermo de la rodilla y el juez dio por injustificadas las faltas y libraron la orden de aprehensión en su contra.
El 11 de julio agentes de la Vicefiscalía Anticorrupción intentaron ingresar al fraccionamiento donde vive para ejecutar la orden, pero el guardia les impidió el acceso.
En varias ocasiones el titular de la Vicefiscalía Anticorrupción, Marco Antonio Álvarez, señaló que las enfermedades y los cambios de abogados solo eran tácticas dilatorias para evitar el inicio del proceso penal.
Cuen Díaz tiene otra investigación en curso por el presunto uso de justificantes médicos falsos.
En distintas ocasiones presentó documentos médicos para justificar sus inasistencias a las audiencias y la FGE investigó uno que envió en marzo, expedido por un médico del IMSS.
Los agentes investigadores revisaron las grabaciones de la clínica del IMSS donde fue expedido y en ningún momento observaron que Cuen Díaz haya acudido al consultorio.
Otros justificantes que envió, la FGE encontró que fueron emitidos por Daniel Emilio Cuen Lazcano, primo de Cuen Díaz y director del Centro de Investigación y Docencia en Ciencias de la Salud de la UAS.
Además del proceso por negociaciones ilícitas, Cuen Díaz enfrenta otros tres casos por el delito de desempeño irregular de la función pública, junto con el ex rector de la UAS, Juan Eulogio Guerra Liera, el rector separado del cargo Jesús Madueña Molina y los integrantes del Comité de Adquisiciones.
Según la FGE, como integrante del Comité, Cuen Díaz aprobó que se asignaran sin licitación los contratos para la compra de carne de res por 68 millones de pesos y de tortillas por 45 millones de pesos y la contratación de obras de mantenimiento y rehabilitación por 20 millones de pesos.
Contra Cuen Díaz, los integrantes del Comité y el rector separado del cargo hay otro proceso pendiente de iniciar por compras de uniformes, lonas, mamparas y artículos de publicidad por 56 millones de pesos, una más por la compra de materiales de electricidad, plomería y de construcción por 23 millones de pesos y otra por la compra de equipo de cómputo por 123 millones de pesos.
Artículo publicado el 18 de agosto de 2024 en la edición 1125 del semanario Ríodoce.
