90 mil usuarios pagarán agua sin consumir por 4 millones 752 mil pesos

Unos 90 mil usuarios domésticos urbanos de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome (Japama) pagarán un sobreprecio del consumo del agua porque la paramunicipal reducirá en 40 por ciento la dotación y cobrará, además, el excedente de seis pesos por metro adicional.

De darse la reducción del gasto en 720 mil metros cúbicos de agua mensuales, la paramunicipal estaría embolsándose4 millones 752 milpesos al mes, más adicionales no contabilizados.

El gerente general de Japama, Carlos Julián Avendaño García, justificó que la determinación se tomó luego de que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) les sugiriera reducir en 40 por ciento el gasto en las tomas domiciliarias porque en la misma proporción bajará a la paramunicipal la dotación en bloque en el mismo porcentaje.

Esto como una medida forzada de ahorro de agua ante la sequía extrema que padece la entidad y que fue ratificada por la Comisión Estatal de Agua Potable y Alcantarillado de Sinaloa (Ceapas).

Con la medida, que según el funcionario se aplicará a partir del jueves 1 de agosto, cada uno de los 90 mil usuarios domésticos urbanos tendrán un gasto máximo de 12 metros cúbicos mensuales por el que pagarán 179.11 pesos. Cada metro cúbico adicional tendrá un costo de 6.60 pesos.

El nuevo consumo máximo se fijó reduciendo 40 por ciento los 20 metros cúbicos que se tomaba como cuota.

Aunque la paramunicipal disminuyó la cuota, no lo hizo con el costo.

—¿Por qué no baja el costo en la misma proporción?

—Porque no se impacta la tarifa, sino el gasto. No estamos moviendo la tarifa, sino la dotación.

—¿Es un incremento disfrazado?

—No, no lo es. No movemos la tarifa, queda igual. La tarifa la fija el Congreso del Estado, y no se está moviendo. La respetamos.

—¿Para mover la asignación, necesita la autorización del Congreso?

—No. Consideramos que no. No lo vemos así. Es una determinación por la emergencia de sequía que vivimos. Se adoptó para evitar llegar al día cero, que es cuando no se pueda suministrar agua a las personas.

—¿La reducción la aprobaron los consejeros?

—A ellos se les informó, y sí, lo autorizaron. En cada asamblea mensual se aprueba el orden del día, y cada punto pasa a votación. Cuando se tocó el tema, lo aprobaron.

—¿De dónde saca la reducción del 40 por ciento?

—No lo sé. Fue una sugerencia del organismo técnico, Conagua.

—¿Pidió alguna justificación de ese cálculo?

—No

—¿Sólo lo aceptó?

—Si

—¿Y decidió aplicarlo?

—Sí.

—¿Cuánto tiempo permanecerá esa reducción en los consumos?

—No lo sé, dependerá de Conagua. Supongo hasta que ellos digan que se terminó la sequía, que ya salimos del punto rojo. Sabemos que las presas se están recuperando, pero eso no es el caso. El fondo, es el desperdicio de agua que se da mayormente en los hogares.

—¿Cuánto ocupa una persona para resolver sus necesidades de agua en el hogar?

—Dos mil litros mensuales, si aprende a ahorrarla, la reusa y la cuida. Pero no hay esa cultura de ahorro. Una familia de 4 miembros utilizaría 8 metros cúbicos mensuales. En Ahome se tienen hasta 20 metros cúbicos como cuota al hogar, es mucho, es un excedente. La media en Sinaloa es de 10 metros cúbicos mensuales, que es suficiente.

Avendaño negó insistentemente de que se trate de un incremento disfrazado a la tarifa del consumo de agua, pues esta no se tocó.

Consejeros.– José Ramos Ortiz, presidente del Centro Empresarial de Los Mochis y consejero de Japama reconoció que el administrador les informó la intención de reducción del consumo autorizado a hogares urbanos el 15 de julio y dentro del punto 4 del orden del día, pero ningunos de los consejeros lo aprobó pues era netamente informativo.

Además de que ellos respetan al Congreso de Sinaloa que es la única entidad facultada para modificar tarifas y gasto.

La misma posición la tomó Roberto Miranda Lagarde, de Canacintra, quien aseguró que por versión de su suplente se enteró del caso y sostuvo que tampoco fue aprobada por los industriales.

Ambos aseguraron que la disminución en los consumos se da sólo para usuarios domésticos y no en comerciales ni industriales.

Ambos opinaron que, si se traba a de ahorros de agua, deben de aplicarse otras restricciones que afecten menos a las familias.

Dulce María Ruiz, lideresa de Mujeres Empresarias e integrante de la Intercamaral, sostuvo que es la disminución de la dote de agua a los hogares una medida negativa y apta para la capitalización de la paramunicipal a costa de los bolsillos de los usuarios.

La medida, propuso, debe ser derogada y reconsiderada pues se les vulnera el derecho de las personas a tener agua suficiente en sus hogares. “No podremos vivir con la cantidad ahora asignada”.

Recaudatoria.- Guillermo Padilla Montiel, uno de los lideres más críticos de la paramunicipal, consideró que la pretensión de reducir el gasto en los hogares oculta un incremento al consumo, lo que es ilegal proviniendo de la gerencia pues no tiene facultades para hacerla al ser esta exclusiva del Congreso de Sinaloa.

Es también, un rescate financiero de Japama que quebró por las malas prácticas de los gerentes.

Indicó que los usuarios deberán de levantarse en inconformidades.

En tanto que Jacob Efraín Pérez Heiras, presidente del Comité Directivo Municipal del Partido Acción Nacional (PAN), consideró que la pretendida reducción del 40 por ciento en el consumo doméstico urbano de agua anunciado por la Junta de agua de Ahome es recaudatoria y no una medida de ahorro como se pretende hacer aparecer por el gobierno morenista.

Opinó que la sequía es injustificable cuando se pretende aprovechar para exprimir el bolsillo de las familias ahomenses.

El líder del albiazul señaló que está medida de la gerencia de la Japama no es para prevenir y sancionar el derroche de agua, sino un incremento a la tarifa disfrazado, debido a que la paramunicipal se ha manejado con finanzas negativas. “Esto prácticamente es un robo a las familias del municipio de Ahome”, dijo.

Si realmente desean ahorra agua, el Gerente General debería empezar por mejorar el servicio y que llegue buena presión, dar un mantenimiento adecuado al sistema de distribución de agua, atender los reportes de fugas oportunamente, hacer una campaña mediática para sensibilizar a los usuarios, entre otras estrategias.

El director de la facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Octavio Martínez Cázares opinó que si la Japama modificó las tarifas y el gasto sin tener aprobación del Congreso se da una invasión de esferas y facultades que genera un acto arbitrario cuyo combate está en los tribunales, en donde se definirán las responsabilidades para realizar.

“Habida cuenta de que ya hay una asignación de un volumen, y reducirlo o modificarla de manera unilateral, los deja en estado de indefensión y hay una afectación a los bolsillos de los usuarios de las familias, de los sectores”, dijo.

La afectación a los Derechos Humanos es real y deberán de usarse los medios legales y jurídicos para combatirlos, consideró Martínez Cázares.

El diputado César Ismael Guerrero Alarcón, dijo ignorar lo que ocurre con Japama y la determinación de disminuir el consumo a los hogares urbanos.

“En lo personal no tenemos notificación. No sé si llegó notificación ahora que estuvimos en licencia. Mañana (jueves) revisaré si hay solicitud o dictamen. Hasta ahora no he visto absolutamente nada. Es facultad del Congreso las modificaciones de las tarifas y de temas relacionados con el agua. Revisaremos, veremos los números, los análisis completos, haremos el estudio, y resolveremos. El compromiso es revisar lo que está sucediendo”, dijo.

Artículo publicado el 28 de julio de 2024 en la edición 1122 del semanario Ríodoce.