El Gobierno de Estados Unidos anunció una serie de sanciones contra ocho líderes y lugartenientes de La Nueva Familia Michoacana, acusados de estar detrás del tráfico de drogas como fentanilo, cocaína y metanfetamina, así como en una red de tráfico de migrantes en la frontera sur.
Mediante un comunicado el Departamento del Tesoro indicó que entre los sancionados se encuentran los líderes del cártel, Rodolfo Maldonado Bustos, Josué Ramírez Carrera, Josué López Hernández, David Durán Alvárez, Uriel Tabares Martínez y Kevin Arzate Gómez, entre otros, quienes señala, han llevado a cabo “actos atroces, que van desde el control de las rutas de la droga hasta el tráfico de armas, pasando por el blanqueo de capitales y el asesinato”.
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Janet Yellen, secretaria del Tesoro estadounidense, indicó que dichas sanciones “tienen como objetivo un cártel muy poderoso involucrado en el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos”, al señalar que “la crisis de opiáceos y especialmente el aumento de opiáceos sintéticos como el fentanilo, ha devastado comunidades y se ha llevado la vida de miles de estadounidenses”.
Añadió que el presidente, Joe Biden, está “comprometido con hacer uso de todas las herramientas a su alcance para hacer frente al fentanilo y sus precursores químicos para que podamos poner fin a estas cadenas de suministro mortíferas”.
La Nueva Familia Michoacana solía traficar con metanfetamina pero en los últimos años expandió su actividad a la producción de fentanilo que hace entrar en Estados Unidos a través de la frontera “mediante autobuses, entre otros medios de transporte”, informó el Departamento del Tesoro en un comunicado. Una vez en el interior lo envía a ciudades como Atlanta, Houston, Dallas, Tulsa, Chicago y Charlotte.
Mientras que en el negocio de tráfico de personas actúan haciendo fingir a los migrantes, ya sea en fotografías o videos, que están en riesgo de ser asesinados, afirmando falsamente su necesidad de buscar asilo, por lo que les pagan dinero.
También les obliga a transportar drogas y si los migrantes “no cumplen con la orden de vender la droga proporcionada por La Nueva Familia Michoacana, les dicen que ellos y sus familias serán asesinados”, afirma el comunicado.
