Agricultores represan drenes para regar parcelas

El hombre dormita en una camioneta roja que tiene la ventana tapada con hule negro. Justo en las llantas está un perro café, que es el guardia. El vehículo está en los aproches de un puente que se construyó sobre el dren Buenaventura, al poniente de Los Mochis.

El hombre y el can vigilan dos tractores que están colocados en el bordo oriente del dren, en donde también hay algunos tapos a manera de represos. Estos se construyen para evitar que el agua corra y represe, y entonces poder bombearla.

Los dos tractores azules tienen colocadas un par de bombas charqueras que suben el agua a 5 metros de altura. Las bombas descargan en un canal que parece se improvisó a un lado de un camino pedregoso. El canal desemboca en una parcela sembrada de maíz, en donde se han colocado unas pipas plásticas que descansan en bordos que a su vez terminan en los surcos que se extienden adentro del campo.

El hombre, un joven, con rostro cansado, explica que los patrones decidieron rescatar el agua del dren Buenaventura porque el módulo Taxtes les negó agua para la parcela completa, como a todos los usuarios del mismo organismo.

A ellos les dieron agua solo para dos lotes de 4 hectáreas cada uno. Los patrones decidieron sembrar las 8 hectáreas juntas, para ahorrar un tirante, pero les fue negada la maniobra. Entonces, decidieron recuperar el agua del dren para regar los cultivos. Y ya entrados en eso, los productores decidieron sembrar toda la parcela.

“La moneda está en el aire, quizá se recupere la inversión, a lo mejor no, dependerá del riego que se puede recuperar”, opinó el guardia de los tractores.

Dijo que no hay muchos campesinos como ellos, pues la gran mayoría optó por no sembrar o hacerlo con muy poco riego.

La siembra está por los alrededores del ejido Felipe Ángeles en el municipio de Ahome. Allí, la zona ya parece desértica, con manchones de tierra café, en donde la maleza crece y se desarrolla a placer.

De acuerdo con el Organismo de Cuenca Pacífico Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las 11 presas de Sinaloa almacenaban hasta el pasado jueves 14 de marzo, 2671.5 millones de metros cúbicos de agua para el 16.9 por ciento de la capacidad total de almacenamiento, calculada en 22761.1 millones de metros cúbicos de agua.

Del sistema de presas, la Juan Guerrero Alcocer o Vinoramas, en Culiacán tenía el menor volumen de almacenamiento con 7.4 millones de metros cúbicos, aunque la Luis Donaldo Colosio o Huites, en Choix tenía 518.4 millones de metros cúbicos de agua almacenada, que representa apenas el 16.2 por ciento de su capacidad de embalse.

Según las cuentas del 2024 de la Conagua, este año es más seco que el anterior. Las presas revelan una disminución efectiva de 27.1 por ciento de un año al siguiente. El porcentaje representa 37567.9 millones de metros cúbicos de agua menos.

César Enrique Galaviz Lugo, presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur, opinó que la sequía que se padece es realmente fuerte, con reducción de superficie de hasta 50 por ciento. “Le pega severamente a la agricultura y a las actividades económicas secundarias, con la reducción del 50 por ciento de la superficie de siembra. El siguiente será un año muy duro, porque los productores no se han podido recuperar de un año malo”.

Marte Nicolás Vega Román, presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Norte de Sinaloa, reconoció también que la sequía avanza y se profundiza, exigiendo acciones concretas para evitar el derroche y el cuidado del agua.

La situación es tan mala y precaria que la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome (Japama) ordenó la cacería de derrochadores de agua. La multa es severa y dependerá de la reincidencia de los usuarios, y puede ascender hasta los 6 mil pesos y hasta más, dijo Bernardo Xavier Cárdenas, gerente general de la paramunicipal. “Desde ahora hay que forzar el ahorro de agua, porque en los meses siguientes realmente será crítico”, expuso.

Ahora también van sobre los lavaderos de autos clandestinos y de otros negocios que usan agua con demasía.

Guillermo Elizondo Collard, un promotor de sistema de riego ahorradores, dijo que si persiste el derroche de agua en la agricultura, la situación pasará de crítica a severa en muy pocos días.

Y sostuvo que desde ahora ya debe de pensarse en aplicar mecanismos que tecnifiquen los riegos y detengan el tiradero de agua en las parcelas.

“Debemos de pasar a la venta de agua de riego por volumen, al servicio medido, para que se pague lo justo y se evite el derroche”, dijo.

“Ciertamente, la medida es urgente, pero necesaria y deberá involucrar a todos los interesados”, consideró José Jaime Montes Salas, secretario de Agricultura de Sinaloa.

Alfonso Ramírez Cuéllar, ex diputado y promotor de la candidata a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció que la sequía que atraviesa el país ya es un problema en el que se tomarán acciones concretas, como es la presurización de riegos en 250 mil hectáreas de manera inicial, además de lanzar campañas de cuidados del bosque como fábricas de agua y otras acciones.

Artículo publicado el 17 de marzo de 2024 en la edición 1103 del semanario Ríodoce.