La exdiputada, Lucero Guadalupe Sánchez López, a quien se le vinculó sentimentalmente con el exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín el Chapo Guzmán Loera, negó haber entregado pruebas que lo inculparan, ni ser responsable del “hundimiento o caída” del capo, como lo señaló la periodista Laura Sánchez Ley, del diario Milenio.

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En una presunta carta enviada al periodista José Luis Montenegro, la exdiputada por Cosalá rechazó que ella haya entregado los 6 mil mensajes de texto en los que el Chapo le confesaba operaciones, asesinatos y escapes.

“Diarios de circulación nacional en México han referido que yo, Lucero Guadalupe Sánchez López, entregué seis mil mensajes de texto en los que el señor Guzmán Loera me confesaba operaciones relacionadas con droga, asesinatos y escapes, entre otros delitos que cometió mientras fue líder del Cártel de Sinaloa, tal como acota un artículo publicado por el diario Milenio y su colaboradora Laura Sánchez Ley”, afirma

“Esa aseveración es absolutamente falsa. Carece de sustento a pesar de que hay información pública y que consta en registros judiciales. La persona que entregó las conversaciones que en algún momento tuve con el señor Guzmán Loera, según refiere una exhaustiva investigación del gobierno de Estados Unidos, fue un técnico de origen colombiano contratado directamente por el Chapo; él era encargado de espiar a amigos, familiares y personas de interés de Joaquín Guzmán”.

Y añade: “Los seis mil mensajes de texto no los entregué yo.”

La exdiputada acusa que contra su persona “se han esparcido calumnias e injurias de manera irresponsable por casi todos los medios de comunicación de México y varios países de América Latina y de Estados Unidos, es alarmante porque estas acciones ponen en riesgo la vida de mi familia, al catalogarme como la supuesta responsable de la sentencia que el juez estadunidense Brian Cogan dictó en contra de Joaquín Guzmán”.

“Yo nunca entregué pruebas que lo inculparan a él de forma delictiva, porque simplemente no contaba con ellas. El juez Cogan tomó su decisión con base en los testimonios de varios colaboradores cercanos que sí trabajaban con él en los delitos fincados en su acusación formal.”

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E insiste: “Yo nunca colaboré con el gobierno de Estados Unidos para lograr su captura ni la de otros miembros. Actualmente estoy enfocada en rehacer, mi vida”.

Al final, Sánchez López pide a la prensa y a los comunicadores que no malinformen ni tergiversen la información con el propósito de manchar su reputación o por simple lucro, y aclara que por el momento no pretende conceder entrevistas.

La exdiputada local fue detenida en Estados Unidos en 2017 y sentenciada a 10 años de cárcel acusada de conspiración junto a integrantes del Cártel de Sinaloa.