La Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) interpuso una denuncia por presunto peculado y desvío de recursos por más de 60 millones de pesos en contra del ayuntamiento de Tula y el alcalde, Manuel Hernández Badillo.
Las irregularidades que señaló la ASEH ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) refiere a un daño al erario público por 60 millones 679 mil 460 pesos de la cuenta pública 2021.
En el informe realizado a ese ejercicio fiscal, una de las observaciones más sobresalientes refiere a la falta de comprobación de un millón 74 mil 497 pesos por la adquisición de 763 colchones que se entregaron durante el desbordamiento del río Tula en 2021.
Las personas damnificadas por las inundaciones denunciaron que los colchones estaban reconstruidos que representaban una fuente de infección porque encontraron chinches, ácaros y otros daños, por lo que acudieron a Palacio de Gobierno a quemarlos como protesta.
Otro de los recursos no sustentados fueron 21 millones 322 mil 963 pesos relacionados con ayudas a estas mismas personas damnificadas, de las que no hay comprobantes de las adquisiciones.
Las observaciones de la ASEH en la cuenta publicada 2021 también recayeron sobre la adjudicación directa de obras sobre la modernización de la carretera Tula-Refinería por 13 millones 557 mil 707 pesos.
También fueron observables 21 millones 322 mil 963 pesos que de los que no hubo comprobante de que fuera entregado a personas beneficiarias de ayudas como medicamentos, alimentos, servicios de lavandería, fumigación, así como otros productos y servicios.
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