Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo que la ONU transmitió a Estados Unidos su malestar por el presunto espionaje contra el jefe del organismo y ha precisado en una nota de protesta que es una violación de la Convención sobre los Privilegios e Inmunidades.
“Hemos dejado claro que tales acciones son incompatibles con las obligaciones de Estados Unidos enumeradas en la Carta de la ONU y la Convención sobre los Privilegios e Inmunidades de Naciones Unidas”, ha indicado este martes en una rueda de prensa.
La revelación de este presunto espionaje a las conversaciones privadas de Guterres tendría que ver con los documentos clasificados de los Servicios de Inteligencia estadounidense que han sido revelados en las últimas semanas.
En concreto, parte de estos documentos describen conversaciones privadas entre Guterres y la vicesecretaria general, Amina Mohammed, sobre observaciones relativas a la guerra de Ucrania, así como sobre algunos líderes africanos.
Además, en uno de los documentos relativo al acuerdo para la exportación de cereales a través del mar Negro, se da a entender que los Servicios de Inteligencia estadounidenses consideraban que la postura de Guterres sobre el acuerdo era muy “permisiva” con los intereses de Rusia.
