A partir de este miércoles entró en vigor en Sinaloa la Ley de Educación Superior del Estado de Sinaloa, luego que ayer martes fue publicada por el gobernador Rubén Rocha Moya en el Periódico Oficial.
La Ley de Educación Superior de Sinaloa establece que la gratuidad se implementará en forma progresiva, en función de la suficiencia presupuestal, a partir del ciclo escolar 2023-2024, en el cobro de preinsciripciones, inscripciones, reinscripciones y cuotas escolares en técnicos superior universitarios, licenciaturas, especialidad, maestría y doctorado.
Todos los integrantes del Grupo Parlamentario del PAS votaron la ley en contra por 11 observaciones, principalmente porque consideraron que violaba la autonomía universitaria y era inconstitucional.
Entre los artículos más polémicos fue el tercero, que establece que cualquier iniciativa de reforma a las leyes orgánicas de las universidades deberá contar con una consulta previa, libre e informada a su comunidad universitaria y a los órganos competentes de gobierno, como estable la Ley General de Educación.
La mayor molestia del PAS fue porque se especifíca en la Ley de Educación Superior de Sinaloa que toda consulta para modificar leyes orgánicas será convocada y organizada por el Congreso del Estado, conforme a los parámetros, lineamientos y metodología que considere pertinente, el cual podrá solicitar el auxilio de la autoridad universitaria para la organización de la referida consulta, con pleno respeto a la autonomía.
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Los diputados del PAS señalaron además que la gratuidad debería iniciar el ciclo escolar 2024-2025, ya que este año no se contemplaron recursos para ese rubro en el Presupuesto Estatal de Egresos del 2023.
Del nuevo marco legal fue aprobado por mayoría en el Congreso del Estado el pasado 15 de febrero.
