Los cambios en el Gobierno y la desinformación interna han agravado la problemática
Después de más de un año sin energía eléctrica, escuelas de nivel básico de Sinaloa apenas empiezan a ser atendidas.
Durante el confinamiento por la pandemia de Covid-19, los planteles sufrieron robos que las dejaron sin electricidad. En los planteles se llevaron desde las lámparas hasta los aires acondicionados.
Al iniciar el ciclo escolar en agosto pasado, 43 escuelas no pudieron volver a clases presenciales porque no tienen luz, y otras 113 regresaron a las aulas, pero tienen problemas con el sistema eléctrico.
Hasta que inició el actual ciclo escolar, el Gobierno del Estado empezó con la reparación de las instalaciones eléctricas.
A la fecha, las 156 escuelas con problemas ya fueron notificadas que serán atendidas, pero no en todas han empezado los trabajos.
En algunos planteles se robaron todos los aires acondicionados y el cableado.
En la primaria Manuel Rivas Mejía, robaron los 13 aires que tenía la escuela (comprensor y condensador), los centros de carga, las lámparas y la instalación eléctrica.
Luego del confinamiento, en este plantel volvieron a clases después de Semana Santa de 2021.
La directora, Yurilia Ontiveros Torres comentó que solo tuvieron clases durante unas semanas porque empezaron las altas temperaturas y era imposible tener a los niños en las aulas. Cada grupo tiene de 35 a 40 alumnos.
Desde entonces los alumnos toman las clases completamente en línea.
Señaló que en agosto pretendieron volver a clases presenciales aún sin luz, pero el primer día los padres de familia se manifestaron en la escuela y no dejaron entrar al personal para exigir que siguieran en línea y repararan la instalación eléctrica.
Comentó que la semana pasada personal del ISIFE llegó al plantel para iniciar con las reparaciones y están instalando el cableado.
Por el momento, indicó, desconoce si también les pondrán los aires porque todavía no tiene detallados todos los trabajos que harán en el plantel.
En el jardín de niños, Dora Josefina Ayala Castro, también tienen más de un año sin luz.
Ahí los ladrones tuvieron tiempo de forzar las protecciones de las ventanas o quitarlas por completo, y quebraron los cristales.
De acuerdo con la directora, Judith Beltrán, desde abril del año pasado la mitad de los alumnos van a clases presenciales en horario reducido y la otra mitad en línea.
“Estamos en modelo híbrido en estos momentos por decisión de padres de familia; ellos deciden quién está de forma virtual y quién está de forma presencial”, indicó.
Mencionó que durante el confinamiento en ese plantel “sufrimos vandalismo, terminaron con el jardín, nos robaron, parte del cableado, los compresores de minisplit, todas las pastillas (de los centros de carga), cables, lámparas, todo lo que pudieron de equipo”, expresó.
En esa escuela se llevaron cinco aires acondicionados y el resto no pudieron porque tenían protecciones.
En los salones forzaron las protecciones y quebraron los cristales para entrar a robar los cables de las lámparas y de los centros de carga. En una de las aulas quitaron toda la protección de la ventana para entrar.
La directora señaló que han realizado los trámites del seguro de los equipos, pero hasta el momento no han tenido respuesta a pesar de que han entregado todos los documentos que les pidieron.
La semana pasada, indicó, acudió personal del ISIFE para informarles que la escuela será reparada y afuera colgaron una lona que señala que el plantel está contemplado para la rehabilitación.
El jardín de niños Ángela Peralta también tenían más de un año sin energía eléctrica.
Tuvieron que manifestarse en un evento del gobernador Rubén Rocha Moya para que fueran a arreglarles.
La directora Rosa del Carmen Vega dijo que la escuela tenía 12 aires condicionados y durante la pandemia se robaron unos y los que tenían protección y no pudieron llevárselos, los destruyeron.
Comentó que también les robaron el cableado y tuberías de cobre.
El año pasado volvieron a clases y atendieron a los niños afuera de las aulas, porque tenían luz.
Después, empezaron a dar clases presenciales a la mitad de los alumnos y al resto en línea.
Los padres de familia y maestros tuvieron que manifestarse para que fueran a reparar la instalación eléctrica. Acudieron a un evento Rocha Moya y ahí le expusieron el problema.
“Le dije que cómo era posible que invirtieran en otras cosas y en la educación no”, comentó la directora.
Señaló que un día después personal de gobierno acudió al plantel a evaluar y días después empezaron con los trabajos que ya quedaron concluidos y otra vez ya tienen energía eléctrica y aires.
Desde que inició el ciclo escolar, el gobernador dio a conocer que había 117 escuelas con problemas de energía y el lunes pasado, durante su conferencia semanera, se enteró que en realidad son 156.
Mientras el mandatario anunciaba que ya habían iniciado los trabajos en algunas escuelas y otras estaban en proceso de contratación, el director del Instituto Sinaloense de Infraestructura Física, Hugo Echave, le dijo que habían ampliado la lista de escuelas en 39 más.
“Lo que no me gusta es que no me informen a mí los datos precisos, me dicen que son 117 las escuelas que tienen problemas y ahora hay 39 más, eso no lo sabe el gobernador, lo saben allá ustedes, yo no. Ahora tengo que hablar de 156 porque me corrigieron mis funcionarios, 156”, reclamó.
Mencionó que actualmente hay 10 escuelas en las que ya concluyeron los trabajos, en 66 las obras están en ejecución y en 80 están en proceso de contratación.
Detalló que para reparar los planteles invertirán 130 millones de pesos.
Artículo publicado el 25 de septiembre de 2022 en la edición 1026 del semanario Ríodoce.
