“De no tratarse a tiempo la enfermedad puede producir el síndrome esofágico (síndrome de Mallory-Weiss) el cual no tiene cura, y a largo plazo la persona podría desarrollar un cáncer de esófago”
Las agruras también conocidas como acidez estomacal, “es la sensación de ardor o dolor en el pecho y la garganta, que se caracteriza por un sabor ácido o amargo en la boca, ligada a malos hábitos alimenticios o el estilo de vida de cada persona”, explica la nutrióloga Andrea Aceves.
La acidez “ocurre cuando el esfínter esofágico inferior (que es un músculo al final del estómago) no se cierra adecuadamente al desgastarse y provoca que los ácidos del estómago se regresen al esófago (que es el tubo por donde pasan los alimentos) y esto produce inflamación y otras alteraciones”.
Aceves agrega que, el que se presenten agruras “depende de los hábitos de cada persona, en especial de la dieta que sigue y la forma de ingerir los alimentos”.
Dicho síntoma, explica, “ocurre después de comer o al acostarse, permaneciendo el malestar durante dos horas o más”.
Las principales causas, señala, “tienen que ver con la ingesta de determinados alimentos y bebidas, como: las frutas cítricas; el tomate y sus derivados; alimentos fritos o grasosos; el chocolate; la menta; picante, y algunas especias como el ajo y pimienta; así como el consumo de bebidas energéticas, carbonatadas; alcohol, cafeína y refrescos”.
“El que ciertos alimentos provoquen dicho síntoma depende de que tan tolerante sea la persona a algunos alimentos”, aclara.
Agrega que el que se presente acidez “también tiene que ver con la forma en la que se ingieren los alimentos, si comes muy rápido, o grandes cantidades, o si comes y te acuestas; existen otros factores como el estrés, la obesidad, el sobrepeso, el fumar y el embarazo”.
Si los síntomas son recurrentes, es importante atenderse
La recurrencia, indica Aceves, “depende de los hábitos de cada persona”, pero “si se presentan los síntomas más de dos veces por semana es posible que tenga la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), y debe acudir a atención médica para confirmar o descartar dicha enfermedad”.
La Secretaría de la Salud indica que en algunos casos se requieren medicamentos o cirugía, sin embargo, los síntomas pueden mejorar.
“De no tratarse a tiempo la enfermedad puede producir el síndrome esofágico (síndrome de Mallory-Weiss) el cual no tiene cura, y a largo plazo la persona podría desarrollar un cáncer de esófago” explica Aceves.
En la mayoría de los casos, “la acidez estomacal se puede tratar en casa con medicamentos y cambios en los hábitos alimenticios y el estilo de vida”, indica Andrea.
La prevención es clave
La especialista en nutrición, Andrea Aceves, hace especial hincapié en la prevención, “iniciar por descartar ciertos alimentos que lo provocan, al tener la sintomatología se tenga un tratamiento adecuado; después de comer se debe esperar dos horas para acostarse, ya que el alimento no baja hasta el estómago por lo tanto no hay una buena digestión”.
Por lo anterior señala es importante visitar a un especialista, “ya sea un gastroenterólogo o un nutriólogo, para que le brinden al paciente un tratamiento adecuado y una dieta personalizada de acuerdo a sus necesidades” indica.
De acuerdo con la Secretaría de la Salud, en México alrededor del 40 por ciento de las personas presentan o han presentado acidez estomacal a lo largo de su vida, debido al estilo de vida y la gastronomía en el país.
Artículo publicado el 19 de junio de 2022 en la edición 1012 del semanario Ríodoce.
