La mañana del 28 de febrero de 2020 en Sinaloa se detectó uno de los primeros dos casos de COVID-19 en el país, y a dos años del hecho, la enfermedad sigue su marcha con 119 mil 215 casos y 9 mil 631 muertes por el virus.
El primer paciente del COVID-19 permaneció aislado en el hotel Lucerna, sitio que durante los siguientes días se convirtió en sede de conferencias de prensas de los entonces secretarios de turismo y salud, Óscar Pérez Barros y Efrén Encinas Torres, respectivamente.
La Secretaría de Salud llamó a una conferencia de prensa esa mañana viernes, confirmando el diagnóstico positivo al COVID-19 de una persona del sexo masculino, de 41 años de edad.
Según el reporte que se manejó, el paciente, originario del estado de Hidalgo, habría estado por motivos de trabajo en Italia.
En los días posteriores comenzaron los primeros contagios locales y a 732 días del primer caso en Sinaloa, el estado sigue con una alta incidencia, sobre todo en Culiacán, que desde el día uno de la pandemia se ha mantenido como el epicentro de la enfermedad en el estado.
En ese lapso la capital ha acumulado casi 50 mil casos de los más de 119 mil 200 y 3 mil 395 muertes de las más de 9 mil 630.
En el informe diario de ayer, la Secretaría de Salud reportó 142 nuevos contagios y ningún fallecimiento, una estadística que siempre se ha mantenido con rezagos e irregularidades en su reporte.
