Culpan al “narco-estado” de los feminicidios y desaparecidos en Sinaloa

“Compañeras y personas que escuchan van 36 mujeres asesinadas violentamente en Sinaloa en lo que va del 2021, aun no se identifica a la joven que fue encontrada calcinada en un tambo de metal aquí en Mazatlán y quiero ‘festejar’ el grito de independencia”, manifestó la tarde del 15 de septiembre, la feminista desde el kiosco de la plazuela República en Mazatlán.

“Nosotras no le debemos nada a esta patria, continuó, al contrario, nos deben a nosotras la justicia de todas las mujeres que ya no están por culpa de la violencia machista, de la violencia misógina, por culpa del narco-estado y por culpa de la autoridades incompetentes, por eso les pido a todas un minuto de ruido por todas las que nos faltan, porque el silencio ya se los dimos mucho tiempo”.

El minuto de ruido en el kiosco estuvo precedido por la marcha del contingente de mujeres que desde las 18:20 horas, inició en el monumento a la Mujer Mazatleca, y recorrió la avenida Ángel Flores enarbolando una bandera tricolor, carteles de fotografías y cruces color de rosa de personas desaparecidas que vivas en la memoria de los manifestantes cobraban vida.

“¡Vivas se las llevaron, vivas las queremos!”, gritaban las mujeres, dos de ellas con sendos altavoces.

Cuando se toparon con las vallas de policías municipales que impedían el acceso a la explanada municipal, las mujeres no recularon, sino que avanzaron gritando su consigna dedicada a los guardianes del orden del palacio municipal.

“La policía no me cuida, me cuida mi familia, la policía no me cuida me cuidan mis amigos”, reprochaban.

Los caminos cruzados que protagonizaban el colectivo de rastreadoras “Por las Voces Sin Justicia” y las feministas con la policía municipal, se transformaron en jaloneos donde una joven activista lastimada comprobaba en la práctica que los agentes municipales no la cuidaban a ella, sino al palacio municipal.

La señora Guadalupe Pérez de 65 años de edad, con una cruz de madera en sus manos, señalaba el trato de los policías, para que los reporteros tomaran nota; la cruz que cargaba era la desaparición de su hijo César Octavio Cantú Pérez, de 26 años de edad, su suplicio comenzó el 8 de enero de 2021 cuando fue privado de su libertad, en la colonia Benito Juárez.

“En la colonia Benito Juárez hay mucho ‘levantado’; se lo llevaron de la calle en una camioneta, denunciamos en Fiscalía, pero aun no hay nada, cuando estoy comiendo, estoy pensando: ¿y mi hijo dónde está?”, dijo a Ríodoce.

Rosario Millán, de 37 años, su compañera de infortunio, también cargaba con su cruz, pues su esposo Carlos Camacho Mariscal de 39 años, fue privado de su libertad, el 28 de mayo de 2020, en la colonia Benito Juárez.

“Eran 21:30 horas, llegó un grupo armado, vestido con chalecos de la Marina, y se lo llevó y los hombres dijeron que lo buscaran en la Procuraduría General de la República, se interpuso denuncia en la Fiscalía, y hasta la fecha no sabemos nada; ya va para un año y cuatro meses”, expresa.

Alejandra Martínez Carrizales, vocera del colectivo Por las Voces Sin Justicia, cuyo hermano, Ismael Alejandro Martínez Carrizales, fue privado de la libertad el 12 de julio del 2020, manifiesta que en el colectivo están integradas 15 personas con familiares desaparecidos, pero en general, tienen registradas 230 personas desaparecidas en Mazatlán.

“Pero hay unas personas que por ejemplo, nos dicen, se nos ‘desapareció mi familiar’, y después dicen, ‘sabes qué ya no quiero que lo pongas’, por miedo y por otras causas; sabemos que los amenazan y ya se detiene su búsqueda”, explica.

De su consanguíneo, relata: “Mi hermano cumplió 26 años en abril, tenía 25 cuando se lo llevaron, él se acababa de graduar de piloto y apenas iba a hacer sus horas de vuelo, pausaron por la pandemia y apenas iba a realizarlas pasando eso (el coronavirus)”.

Cuenta que al percatarse de que la FGSE no hacía nada por los desaparecidos, el colectivo organizó en diversos puntos de Mazatlán, venta de agua natural, agua fresca de frutas y galletas hechas en casa, para recabar recursos económicos y viajar a la ciudad de México a buscar justicia.

“Recaudamos un poco, y un poco que nos cooperó Yadira Rosete, para uno de los pasajes; y así en realidad fue como pudimos viajar a la ciudad de México, porque en realidad no nos apoyó Atención a Víctimas”, dijo.

El 13 de julio de 2021, integrantes del Colectivo Por las Voces Sin Justicia, viajaron desde Mazatlán, hasta la ciudad de México, buscando ser escuchadas por Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, en sus reclamos de justicia por la privación ilegal de la libertad de sus familiares.

“Fuimos el 13 de julio, quedaron de venir en mes y medio…ya tienen dos meses y es hora que no llegan, diario les mando mensajes y hasta ahorita”, expresa Marisela Carrizales, madre de Ismael Alejandro.

En Atención Ciudadana, las canalizaron hacia la Vicefiscalía General de la República donde les prometieron que a más tardar en septiembre viajarían a Mazatlán para revisar los expedientes en la Agencia del Ministerio Público en Investigación de Desaparición Forzada de Personas de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa.

“Nos dirigimos con Atención Ciudadana de la Presidencia de la República (ACPR), ella (la titular de ACPR) nos mandó a la PGR y ahí nos atendió el Vicefiscal y él nos prometió que iba a venir a revisar las carpetas de investigación a Mazatlán”, comenta Martínez Carrizales.

“Todavía los estamos esperando para que se den cuenta que aquí en Mazatlán no se hace nada, absolutamente nada aunque nosotros aportemos, simplemente en Fiscalía (General del Estado de Sinaloa) no se trabaja”, dijo Martínez Carrizales.

Por ello, con sus dolores a cuestas, en el 211 aniversario de la Independencia, feministas y el colectivo Por las Voces Sin Justicia, acudieron primero al kiosco y después a la explanada municipal a dar un grito diferente al del alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres, el “Químico” Benítez.

“Nosotras no le debemos nada a esta patria, al contrario, nos deben a nosotras la justicia por todos los feminicidios y desaparecidas en Sinaloa”, enfatizaron.

Artículo publicado el 19 de septiembre de 2021 en la edición 973 del semanario Ríodoce.