Al inicio de enero se registran más de 80 mil contagios en una semana y se supera el primer pico de muertes

Apenas concluían las fiestas decembrinas e iniciaba el 2021, cuando la pandemia de COVID-19 en México se recrudeció alcanzando nuevos máximos en muertes y contagios. Y en la semana 1 de este nuevo año se registraron cerca de 5 mil 700 muertes y más de 86 mil contagios.

Las cifras semanales son hasta ahora las más altas de la pandemia, y superan el primer pico de poco más de 5 mil muertes alcanzado en la semana 29 (12-18 de julio), mientras que los contagios duplican los 49 mil casos reportados también en esa fecha.

Esta segunda ola, que más bien parece un tsunami, ha traído otro problema que no ocurrió en el primer embate: los hospitales se están saturando, principalmente en las ciudades con mayor población. La Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, Nuevo León, Hidalgo, Puebla, Morelos, Guerrero y Nayarit son los más afectados. Ahí los hospitales están llegando al tope de su capacidad o han rebasado ya el 50 por ciento.

El Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME por sus siglas en inglés) de la Universidad de Washington, prevé que de continuar las tendencias de contagios, los 32 estados del país tendrán un “estrés alto o extremo en las camas de hospital”.

“En algún momento, desde enero hasta el 1 de mayo, 32 estados tendrán un estrés alto o extremo en las camas de hospital… y en la capacidad de las UCI (Unidad de Cuidados Intensivos)”, señala.

El nivel de “estrés” o saturación que tendrán los hospitales, el Instituto los divide por colores según los cuantiles observados de la proporción máxima de camas ocupadas por pacientes con COVID-19. Menos del 5 por ciento se considera estrés bajo, 5-9 por ciento se considera estrés moderado, 10-19 por ciento se considera estrés alto, y más del 20 por ciento se considera estrés extremo.

En Sinaloa, de acuerdo al IHME, se alcanzará un “estrés extremo” en camas de hospitalización entre la segunda quincena de enero y se prolongará hasta mediados de marzo.

El aumento de contagios que aún cuando se centra en los estados antes señalados y en una proporción inferior en Quintana Roo, Veracruz, Tlaxcala, Sonora, Michoacán, Oaxaca, Jalisco y Baja California, ha llevado a que a partir del lunes 18 de enero el número de estados en color rojo, de máximo riesgo en el semáforo epidemiológico, pasara de cinco a 10; 19 estados más, entre ellos Sinaloa, se encuentran en color naranja, de riesgo alto, dos están en color amarillo, y Campeche es el único que se ha mantenido en color verde, de riesgo bajo.

El mismo IHME estima que hasta el 11 de enero se ha infectado el 40 por ciento de la población en México. “Pero en nueve estados más de la mitad de la población está infectada. Los que tienen más población infectada son la Ciudad de México, Baja California, Sonora, Coahuila y Quintana Roo”.

Los resultados preliminares dados a conocer en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) COVID-19 señala que el 25 por ciento de la población se habría infectado hasta diciembre de 2020.

Ambas cifras están muy por encima de los 1.7 millones reportados hasta el jueves 21 de enero por la Secretaría de Salud Federal, y que representan apenas el 1.3 por ciento del total de la población.

La pandemia imparable

Aún cuando diciembre presentó las mayores cifras de muertes y contagios, y se pensaba que en la semana 50 (6-12 de diciembre) se había alcanzado el segundo pico, a medida que transcurren los días y las cifras se actualizan, el “acmé” de este nuevo rebrote, parece que aún no llega.

La cifra de 71 mil contagios registrada en la semana 50, hoy pasó a 75 mil 500, la cual fue superada nuevamente en la semana 53 (27 de diciembre-2 de enero), cuando se reportaron cerca de 80 mil contagios. Una semana después en la 1 de 2021 (3-9 de enero), se dio un nuevo récord, el más alto hasta el momento, con 86 mil 900 casos.

Salud Federal no ha reportado la estadística de las semanas posteriores, pero en la base de datos que aún no está completa, se observa que la cifra podría superar los 87 mil contagios en la semana 2 del año.

La estadística de muertes ocasionadas por el COVID-19, tiene un comportamiento similar al de los contagios.

En la última semana de diciembre y la primera del año actual, han ocurrido más de 5 mil muertes por semana, cifras que no se presentaban desde mediados de julio, cuando la primera ola ocasionó el mayor número de muertes por semana.

Hasta el jueves, oficialmente se reportan 146 mil decesos ocasionados por la infección. En la proyección más reciente del IHME del 13 de enero, la cifra de 165 mil muertes proyectada para el 1 de abril, se ajustó a 176 mil para el 1 de mayo.

“Esto representa 43 mil muertes adicionales del 11 de enero al 1 de mayo. Las muertes diarias alcanzarán un máximo de 780 el 17 de enero de 2021”, señala. Ese día Salud Federal reportó 809 decesos.

“Los casos notificados diariamente en la última semana aumentaron a 6 mil 700 por día en promedio en comparación con los 6 mil de la semana anterior. Las muertes diarias en la última semana aumentaron a 740 por día en promedio en comparación con 700 la semana anterior. Esto convierte a COVID-19 en la causa número uno de muerte en México esta semana”, señaló el Instituto.

Por el número total de muertes, el sitio worldometers.info sitúa a México en el cuarto lugar a nivel mundial, por debajo de Estados Unidos (420 mil muertes), Brasil (214 mil) e India (153). En el sito 20 en muertes por millón de habitantes.

Por el total de casos, el país se sitúa en el ranking mundial en el sitio 13 y en el 96 en casos por millón de habitantes.