El diputado de Morena, Apolinar García Carrera, llamó a estar unidos para defender la familia tradicional ante el riesgo de que en la presente Legislatura se puedan aprobar reformas al Código Familiar para hacer legal el matrimonio de personas del mismo sexo.
En conferencia de prensa, expuso que aunque el pasado 18 de junio de 2019 se emitió un voto en contra, existe la intención de grupos LGBT como el que encabeza el activista Santiago Ventura, de aprovechar lagunas legales para obligar al Poder Legislativo a aprobar reformas al Código Familiar.
Aclaró que no está en contra de las uniones de personas homosexuales, por lo que consideró que es importante trabajar para legislar y crear una figura jurídica donde dichas personas tengan lugar.
El legislador recordó que él en lo personal votó en contra del matrimonio del mismo sexo porque realizó una encuesta en el distrito en donde vive y encontró que sólo entre un 6 y 8 por ciento de los ciudadanos estaban de acuerdo con la reforma al Código Familiar.
Lamentó que los jóvenes actualmente están siendo bombardeados por una ideología de género y los llamó a defender el matrimonio tradicional.
Aunque aseguró que no es partidario de una reforma al Código Familiar para hacer legal el matrimonio de personas del mismo sexo, estaría de acuerdo que el tema que se lleva a consulta para saber que piensa la población, porque en estos temas al no manifestarse la mayoría, pareciera que la expresión de la minoría son en realidad la mayoría.
“Dios es un muy grande, y no se ha aprobado”, expresó al señalar que para reformar el Código Familiar y permitir el matrimonio del mismo sexo es necesario la mayoría simple, en tanto que en otras entidades como Baja California se requiere la mayoría calificada.
Mencionó que ha presentado un par de iniciativas para defender la familia tradicional, como las reformas al marco legal para acotar los requisitos de adopción en Sinaloa.
Frente a los señalamientos de los grupos LGBT que argumentan ser sujetos a discriminación porque no es legal el matrimonio en Sinaloa, refutó que el matrimonio no es un derecho, sino un contrato, porque de lo contrario el Estado estaría obligado de otorgarle a él una mujer como pareja.