El estadio de futbol y los gastos en “Puro Sinaloa” fueron puestos a debate en la comparecencia del secretario de Administración y Finanzas
Para los diputados de Morena, el gobernador Quirino Ordaz Coppel incurrió en excesos en gastos, invirtió bajo su capricho en un estadio de futbol en Mazatlán y se excedió en gastos en su emblema “Puro Sinaloa”, en lugar de atender necesidades del gasto social.
Lea: Las trampas de la publicidad ‘oficial’: Del ‘Puro Sinaloa’ a los ‘Municipios de la Esperanza’ https://bit.ly/2M2MaPg
Esos fueron los señalamientos que escuchó el titular de la Secretaría de Administración y Finanzas, Luis Alberto de la Vega Armenta, al comparecer vía remota con los diputados de la Comisión de Hacienda y Administración del Congreso del Estado de Sinaloa.
En medio de la pandemia, el funcionario público debió comparecer, vía remota, ante los diputados para explicarles que la emergencia sanitaria provocada por COVID-19, marcó una importante contracción económica y significó un reto para las finanzas públicas por la presión en el gasto de salud, así como la necesidad de asignar mayores recursos para atender las funciones de desarrollo social y apoyo a la economía.
El mayor logro que presumió frente a diputados fue que la gestión de Ordaz Coppel no ha recurrido a mayor endeudamiento, pese a los escenarios como la pandemia, sino solamente han utilizado créditos a corto plazo que se han cubierto a tiempo.
El Grupo Parlamentario del PRI respaldó al funcionario estatal en el cumplimiento de las metas y objetivos trazados por su administración, y que están plasmados en el Plan Estatal de Desarrollo 2017-2021.
En contraste, la presidenta de la Comisión de Hacienda y Administración, Victoria Sánchez Peña, le señaló al funcionario que no se puede hablar de un gobierno eficiente cuando se prioriza un interés personal, imagen, negocios y publicidad.
La Ley de Austeridad, señaló la diputada de Morena, parece que es letra muerta para la administración estatal por el uso de aeronaves y gastos de comunicación social.
Al tercer trimestre del 2020, el capítulo de servicios generales se incrementó en casi un 100 por ciento, con 916 millones de pesos, donde los servicios de reparación y mantenimiento se incrementaron en 360 por ciento; en tanto que los de comunicación social en un 283 por ciento.
El gasto de más de 700 millones de pesos en el estadio de futbol profesional en Mazatlán fue el tema que se le cuestionó en repetidas ocasiones al tesorero estatal. No solo fue el monto de la inversión, sino porque, calificaron, se le “regaló” al dueño de TV Azteca.
Lea: Quirino ‘regala’ estadio a Salinas Pliego https://bit.ly/2M2Mspk
En defensa el tesorero estatal argumentó que, cuando pase la pandemia, la construcción del estadio generará empleos, mejora en la calidad de vida de las colonias aledañas, una derrama económica en el sector hotelero, restaurantero, aéreo y otros servicios, además adicionalmente un posicionamiento nacional del estado como un destino turístico.
El estadio, sostuvo, lejos de ser un gasto, se convierte en una inversión porque traerá beneficios presentes y futuros para el estado de Sinaloa.
Los cuestionamientos sobre la construcción del estadio también fueron señalados por el presidente de la Comisión de Fiscalización, Marco Antonio Zazueta, al poner en tela de duda que las finanzas se manejen en forma prudente, como si no hubiese problemas que atender en Sinaloa como el desempleo o la inseguridad.
Sumó además que los fallos de adjudicación de obras del estadio muestran que desde 2017 a 2019 se le han destinado 652 millones de pesos, pero el derroche fue mayor porque en el 2020 todavía continuaba con la construcción de elevadores y otros gastos a cargo de los contribuyentes sinaloenses.
El otro punto que cuestionó es que la construcción del estadio no estuvo incluida en el Plan de Obra Pública como lo ordena la Ley de Obras Públicas. “De principio a fin fue una obra a chaleco, impuesta por las simples ganas del gobernador y como si el dinero público fuese de su propiedad”.
Pero adicionalmente, señaló el diputado de Morena, el inmueble propiedad del gobierno estatal fue cedido totalmente al dueño de TV Azteca sin que al momento se haya respondido al Congreso del Estado solicitud alguna sobre el estadio y rendido cuentas a nadie. “Fue un regalo costoso de más de 700 millones de pesos a cambio de una bicoca”.
Recordó que el gobierno estatal le concedió a Tv Azteca por 10 años el exclusivo derecho para administrar, utilizar, explotar y comercializar el estadio, a cambio de 400 boletos sin costo y dos cajones de estacionamiento.
La diputada de Morena, Francisca Abeyó Jordá, cuestionó que se programó un gasto en el presupuesto y terminó siendo mucho mayor en abierta violación a la Ley de Austeridad que señala la limitación de los gastos de publicidad.
El caso concreto cuestionado fue la promoción del eslogan “Puro Sinaloa” que calificó como un “gasto inútil, un despilfarro de recursos públicos” que comenzó desde el primer día de gobierno hasta el día de hoy con la complicidad de la Auditoría Superior del Estado.
El primer año se tenían autorizado gastar solo 25 millones para propósitos de publicidad, pero terminó gastando 340 millones de pesos más; en 2018 tenía aprobado sólo 22 millones, pero gastó 494 millones de pesos; en 2019 con solo 22 millones de pesos aprobados, terminó gastando 347; y el año pasado en plena pandemia del coronavirus, mientras hospitales como el Pediátrico carecían de medicamentos, gastó más 271 millones de pesos.
Por las cifras registradas el gobierno estatal “tiró a la basura” mil 477 millones de pesos porque el “Puro Sinaloa sólo sirve para recodarle a la gente que el gobernador es del PRI”, expresó.
Comparó que el gasto que el gobernador ha destinado al “Puro Sinaloa” supera con más de 200 millones todo el presupuesto que juntos tienen Ayuntamientos como Cosalá, Angostura, Concordia, Badiraguato, Mocorito, Choix, San Ignacio y Elota.
“Sugiero que el señor gobernador haga su promoción personal con lo que gana en sus hoteles en Sinaloa”, concluyó la diputada de Morena.
Artículo publicado el 17 de enero de 2021 en la edición 938 del semanario Ríodoce.