Esta mañana de sábado, más de 3 mil pescadores de la zona norte de Sinaloa se hicieron a la mar para la captura de camarón de la temporada 2020-2021.
Los pescadores zarparon en una bahía de Ohuira ya saqueada por furtivos que aprovecharon que el gobierno federal y las fuerzas navales permanecieron en tierra por falta de presupuesto para hacer respetar la veda a la pesca del crustáceo.
En la víspera, una bodega utilizada para la maquila de camarón fue cateada por la Fiscalía General de la República en el ejido Ricardo Flores Magón en donde decomisó cinco toneladas de crustáceo silvestre que no tenían los avisos de arribo.
Antes de hacerse a la mar, los pescadores tomaron carreteras y bloquearon el tráfico vehicular para buscar una reconsideración en la fecha de apertura de la temporada, pero fueron ignorados por los funcionarios federales.
Por eso, este sábado a las 07:00 horas, cada uno de los tres mil pescadores zarparon al despuntar el sol.
Entre ellos navegan Nivardo Quintero López y José Cota, quienes con el tiempo encima relingan un chinchorro con aguja e hilo de algodón, para obtener los últimos pesos que utilizaran para avituallar su lancha y hacerse a la mar.
Antes, invirtieron ocho mil pesos en su chinchorro de arrastre, llevaron sus bidones con tres mil pesos de combustible y esperan gastar mil pesos más en el lonche.
Aseguran que están desconsolados porque el camarón ya emigró a aguas profundas y el que está en la bahía es de tallas pequeñas y mediana y sin volumen.
“Durante la veda, los furtivos pescadores sin reserva. Acabaron con la especie y nadie dijo nada. Este estúpido gobierno nos lanzó a la quiebra, por sus ideas de joder las labores productivas primarias. Favoreció a los ladrones, a los saqueadores a los que no respetan nada ni a nadie”, afirmó Quintero.
“A nosotros, por respetar las reglas, las normas nos va a cargar la jodida”, afirmó.
Pese a la desesperanza, ambos pescadores se lanzaron a la mar al despuntar el alba, al igual que otros tres mil “patas saladas”.