Salen a “pescar” a Conapesca y se “enganchan” con el hotel Ocean Palace del gobernador del estado

“Las cartas que te mandamos no tuvieron contestación, Eufemia”, canturreaban los pescadores, aludiendo a las misivas que le habían mandado al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en agosto, una, con el Comisionado Nacional de Pesca, Raúl Elenes Angulo, y la otra, con el alcalde de Mazatlán.

La amarga verdad es que a través de Fernando Ramírez Ibarra, director adjunto de la política de ingresos no tributarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, los empresarios pesqueros ya habían tenido contestación a sus cartas y AMLO lo había ratificado en la mañanera del 31 de agosto.

“Se decidió entregar los apoyos de manera directa a los pescadores y que ya no haya el subsidio, porque sucedía lo que se daba con los agricultores; en los gobiernos anteriores todo el dinero se quedaba arriba, iba a beneficiar a los grandes agricultores y funcionarios; mucha corrupción”, dijo AMLO.

El contingente tenía otros datos, porque a pesar de la negativa irreversible del presidente, salió aproximadamente a las 9:30 horas, desde el cruce de las avenidas Rafael Buelna y Camarón Sábalo, a la altura de la Discoteca Valentinos, con destino hacia la Comisión Nacional de Acuicultura y Pesca en Mazatlán.

Las mujeres maquiladoras que sobreviven de la pesca, extendieron sus mantas como banderas de la desesperanza, en plena zona turística, donde explicaban brevemente al presidente AMLO que por los altos costos del diesel, estaban en riesgo de desaparecer sus trabajos.

La manifestación organizada el viernes 18 de septiembre por los pescadores de altamar, en Mazatlán, tenía como único destino las instalaciones de Conapesca, donde bloquearon durante una hora, los cuatro carriles de las avenidas Camarón Sábalo y Tiburón, y encontraron las puertas cerradas.

El Comisionado Nacional de Pesca, Raúl Elenes Angulo, no se encontraba en Conapesca, aunque hubo quienes comentaron que estaba en Mazatlán, pero se había escondido, para no dar la cara por la carta fallida entregada a AMLO.

Los pescadores descartaron como interlocutor al secretario técnico Jorge Simental, argumentando que es un funcionario “mentiroso” y que dialogar con él sería una pérdida de tiempo, cuando lo que buscan son respuestas positivas.

Cuando los inconformes se toparon con las “puertas del pescador” cerradas recordaron las promesas incumplidas del empresario Quirino Ordaz Coppel, cuando era candidato a gobernador del estado y fue al muelle pesquero a pedirles el voto.

“Vamos a los hoteles del gobernador Quirino Ordaz Coppel, para recordarle la carnita asada que nos prometió cuando andaba en campaña para gobernador, porque los pescadores lo apoyamos y cuando ganó nunca regresó al muelle pesquero”, gritaron los pescadores en tono de reproche y hacia los hoteles Star Palace, Ocean Palace y Pacific Palace se enfilaron a refrescarle la memoria.

Los manifestantes llegaron directamente a la pluma de acceso del Hotel Ocean Palace y colgaron una de las mantas, mientras que las otras se dispersaban a lo largo de las guarniciones y el camellón con palmeras sembradas en el pasto.

Cuando se apostaron frente a los hoteles, los inconformes empezaron a dar grititos como gallitos: “Qui- qui- ri-qui, ¿quién es mi gallito, para estas elecciones a la gubernatura?, y ellos mismos respondían “Qui-ri-no”.

Con lo anterior recordaban los tiempos de campaña del empresario hotelero cuando buscaba la gubernatura del estado y los había “cuenteado”.

Contaron que el entonces candidato a la gubernatura del estado de Sinaloa, por el PRI, alzaba los brazos con los puños sobre su cabeza exagerando el bulto de los “gatos” de sus antebrazos, como diciendo “yo soy su gallo”.

“Yo soy su gente, yo voy a regresar al muelle pesquero, para comernos una carnita asada y mientras comemos platicamos sobre los problemas de la pesca de altamar y ribereña”, prometía el entonces candidato a la gubernatura, Quirino Ordaz Coppel.

Como incumplió sus promesas, ahora le exigirían que la hiciera de intercesor de ellos ante AMLO, con quien se entiende muy bien, para que lo convenciera de que reculara con su negativa del subsidio al diesel marino.

“Pinches políticos mentirosos, pura demagogia, cuando andan en campaña, prometen y prometen, pero cuando ganan no se acuerdan de nosotros”, despotricaban.

Humberto Becerra Batista, dirigente de la Canainpesca, había informado que en una comunicación telefónica, Joel Bouciéguez Lizárraga, subsecretario del gobierno del estado, dijo que venía en camino, pero que el contingente se regresara a Conapesca a manifestarse, mientras llegaba para dialogar con ellos.

“Ya les dolió, no, no aquí hay que quedarnos hasta que venga el gobernador Quirino; ah, verdad, ellos muy a gusto y nuestras familias sufriendo y nosotros ni para el boleto de los camiones urbanos traemos”, reprochaban.

Las preguntas que surgían entre los lobos del mar eran “¿Cómo podía acudir a su territorio empresarial, Ordaz Coppel a dialogar con los inconformes?, ¿como empresario hotelero o gobernante de todos los sinaloenses?
Cuando llegó Joel Bouciéguez Lizárraga, en representación del gobernador traía una expresión de quien fue despertado en plena siesta, porque lo primero que hizo fue amenazar a los inconformes con la intervención de la policía.

Lograron tranquilizarlo y durante unos minutos de conversación se logró una reunión tentativa para el sábado 19, en el muelle pesquero, para ensayar una mesa de diálogo tendiente a resolver el problema que agobia a los pescadores.

“Pura demagogia”, dijo una voz anónima entre los pescadores, al acordarse la retirada del plantón que impedía el libre tránsito de los vehículos.

Apenas había partido Bouciéguez Lizárraga, cuando llegó José de Jesús Flores Segura, secretario del Ayuntamiento de Mazatlán, con el mensaje del alcalde Luis Guillermo Benítez Torres, anunciando que reiteraba el apoyo a los pescadores, pero que no se iba a permitir el bloqueo de las vialidades.

Las vialidades a las que se refería Flores Segura, ya habían sido bloqueadas y desbloqueadas en Conapesca y de pilón, los pescadores habían recordado las promesas incumplidas, a Quirino Ordaz Coppel, frente a sus hoteles- palacios.

Artículo publicado el 20 de septiembre de 2020 en la edición 921 del semanario Ríodoce.