La otra buena opción para ver películas en internet, ahora que se recomienda –debería exigirse y obligarse– la “sana distancia” es Filminlatino, que cuenta con un extenso catálogo de varias nacionalidades, organizado por festivales, género o temática. Regularmente, el sitio cuenta con el apartado Gratismx, que incluye cortos, largometrajes, series y documentales mexicanos a los que se puede acceder de manera gratuita, previo registro a la página.

Lea: Cine: ‘El hoyo’ https://bit.ly/2XkLjg8

Con el país en cuarenta por el Covid-19, al igual que muchas naciones en el mundo, la Secretaría de Cultura y el Instituto Mexicano del Cine agregaron en ese portal el espacio Cinema MX, para disfrutar, sin ningún costo, algunos títulos nacionales, entre los que destaca Los parecidos (México/2015), dirigida y escrita por Isaac Ezban.

La madrugada del 2 de octubre de 1968, una fuerte lluvia ocasiona que varias personas agrupadas en una estación de autobuses no puedan viajar a la Ciudad de México. Cada uno asegura que le urge salir de ahí y llegar a su destino, por lo que todos quieren que se les tome en cuenta en cuanto haya un transporte disponible. No solo la prisa por irse y que la tormenta es cada vez más intensa provocan que los viajeros se desesperen, se tensen y se molesten, sino que sus ánimos llegan al límite cuando se dan cuenta que un extraño fenómeno se apodera de ellos, lo cual los lleva a un solo objetivo: intentar sobrevivir.

Con su segundo largometraje, Ezban reitera lo que le interesa contar y cómo hacerlo. Desde El incidente (2014), el director que también participó en México bárbaro (2014) con el cortometraje La cosa más preciada, posee un estilo propio, una identidad que lo distingue de una enorme cantidad de cineastas más preocupados por satisfacer los gustos de la audiencia y la recaudación en la taquilla: su manera de mezclar el terror, el suspenso, la comedia negra, la ciencia ficción y la fantasía, es por demás interesante.

El manejo sutil del color, que por momentos hace pensar que se trata de un filme en blanco y negro; su inquietante música, que pareciera sacada de una película de terror de los sesenta o setenta; el desarrollo de la historia, casi por completo, en un solo espacio, con los encuadres, ángulos, movimientos y emplazamientos pertinentes; la ambientación y el vestuario acordes a la época, hacen de Los parecidos un producto arriesgado y disfrutable. La mayoría de los personajes tienen su espacio y su tiempo para lucirse, pero el trabajo de Gustavo Sánchez Parra, Carmen Beato, Cassandra Ciangherotti, Humberto Busto y Fernando Becerril, mayormente, sobresale del resto.

En lo general, la película, muy al estilo de la Dimensión desconocida, funciona muy bien. Quizás, ese extraño fenómeno que se apodera de los pasajeros nocturnos y que se hace muy notorio en su físico, raye ocasionalmente en lo ridículo e inverosímil, así haya otros elementos que de alguna manera lo justifiquen. Aunque lo mismo se pudo haber pensado de una historia que tratara de un virus surgido en una sopa y ocasionara varias muertes en un país. La realidad es que, independientemente de su origen y su objetivo exacto, existe un bicho capaz de partir la historia y tener a buena parte de los humanos atemorizados y encerrados en sus casas. No se la pierda… bajo su propia responsabilidad, como siempre.