Especialistas de la Universidad Iberoamericana realizaron un estudio sobre el proceso electoral para la elección de Gobernador de Puebla, en el que encontraron “inconsistencias graves”, ya que el Instituto Electoral de Puebla (IEE) dejó pasar por alto nueve errores de cada 10 casos tomados como muestra.

En conferencia de prensa, Santiago Reyes Hernández, académico de la Universidad Iberoamericana, indicó que se encontró una inconsistencia de la autoridad electoral, quienes por omisión intencional dejaron pasar nueve de cada 10 errores, que sin duda demuestran que el fraude electoral se realizó desde las computadoras.

“El pasado primero de julio dejaron atrás el robo de urnas físico y la manipulación de los representantes de casilla para abrir paso a los delincuentes cibernéticos quienes afectan directamente en una decisión que debiera ser de la ciudadanía poblana”, de acuerdo a Economía Hoy.

La investigación surge como respuesta a una serie de inconformidades ciudadanas causadas por los sucesos violentos que se presentaron el pasado 1 de julio, además de la poca certeza que las cifras arrojan del proceso electoral, ya que en el imaginario de la gente a nivel nacional prevalece la idea de que el proceso electoral del 2018 es el menos cuestionado, muy diferente a la percepción de los habitantes de Puebla.

Los investigadores tomaron la información de la página oficial del IEE y luego de auditar ante notario público, se arrancó con el análisis en dos categorías, la primera y más amplia la “Modalidad Elefante” donde se estudiaron 898 casillas, 12.1 por ciento de ellas se seleccionaron 36 por la importancia de sus irregularidades, en todas ellas existe una diferencia en más de 20 entre el número de votantes a gobernador y el destinado a presidencia.

Además, dentro de estas 36 casillas se nota un número mucho mayor de votantes al del padrón electoral.

Entre las irregularidades, se dijo, es que no existe un listado nominal único, que hay una diferencia entre la información del INE y la del IEE por 19 mil 808 personas.

También, se detectó una diferencia de 64 mil 118 votos totales para Presidente y Gobernador.

“¿Cómo es posible que si a todos los ciudadanos les dieron seis boletas para diferentes cargos, se pierdan más de 64 mil votos?”, cuestionó el académico.

“Tras observar que en la muestra de la investigación del 12.1 por ciento del total de la elección, en el 92.1 por ciento de las Actas presentan errores, lo más grave es que al compararlas contra la publicación del Conteo Distrital Oficial tampoco coinciden las cifras, el fraude en el conteo es oficial” afirmó Reyes Hernández.

En respuesta, encontró que la diferencia de 64 mil 118 sufragios es consecuencia de haber robado de las urnas 104 mil 772 votos y de ingresar ilegalmente (embarazar urnas) 40 mil 654.

De esa segunda irregularidad también se desprende que en el 73.9 por ciento de las casillas no coincide la votación total entre presidente y gobernador; ya que en el 45.24 por ciento de las casillas (3 mil 382) hubo votos robados de la urna, y el 28.65 por ciento de las casillas (2 mil 142) fueron “urnas embarazadas”.