Yecorato, Sinaloa.- Los habitantes de esta comunidad tienen miedo de como rujen las entrañas de la tierra, y mueven el piso, fracturando sus casas, escuela y hasta las ruinas de la antigua iglesia jesuita.

Es tanto el temor, que las familias duermen a la intemperie.

Lo hicieron la noche del 15 de septiembre, durante las fiestas de Independencia y durante la madrugada de este 16 de septiembre.

Los rugidos de la tierra, explican, entre emocionados y asustados, se agravaron este martes y miércoles, luego de tres meses de que comenzaron a sentir los primeros temblores.

En tanta la intensidad de los movimientos, que el ayuntamiento de Choix reportó en su cuenta oficial que 33 sismos se habían registrado en 7 horas, Los temblores no hiban solos sino acompañados de fuertes ruidos, explosiones y exhalaciones de vapor de lo que parecen ser narices del subsuelo.

El Servicio Sismológico Nacional reportó dos sismos en las inmediaciones de esta comunidad. El primero fue a las 20:00 horas del 15 de septiembre con una intensidad de 4.5 grados Richter y se ubicó a 16 kilómetros al noreste de El Fuerte, y el segundo a las 21.57 horas del mismo día a una profundidad de 16 kilómetros y con una intensidad de 3.8 grados Richter ubicándolo a 34 kilómetros al sureste de El Fuerte.

La maestra de la telesecundaria, Lizeth Montiel Heredia, dijo que es más intenso lo que se vive en la sierra que lo vivido en Los Mochis, recientemente, pues acá son constantes y allá sólo fueron tres. “Se escucharon unos ruidos muy fuertes y aparte del temblor algunas casas se cuartearon, la gente está con miedo, anoche algunas personas se durmieron como hasta las dos de la mañana. A las seis de la tarde empezaron los temblores y se terminaron a la una de la mañana, se escuchó un estruendo fuerte, muy alto en todo alrededor, es un sonido muy claro”.

El residente de esta comunidad, Benito Pérez Ruelas, de 64 años de edad, consideró no haber vivido una experiencia de temblores constantes. “Aaquí todos sentimos miedo y nos salimos a dormir afuera de las casas porque teníamos miedo de que volviera a temblar otra vez y como las casas ya están cuarteadas nos pueden caer encima. Mi casa ya tiene tres grietas grandes en las paredes. Los temblores empezaron desde el mes de julio del año pasado, pero ahora si nos pegó recio”.

Hoy miércoles, el alcalde Raúl Acosta Salas visitó la comunidad afectada para comprobar los daños estructurales a la vivienda y gestionar los apoyos de reconstrucción.

Hasta ahora, el dicho de los habitantes no ha sido comprobado.