Contra lo que establece la Constitución, EPN pretende legalizar el uso de armas por parte de agentes estadunidenses que operan en México 

Cuando elementos uniformados cercaron y mataron a Arturo Beltrán Leyva, parapetado en un complejo habitacional de lujo de Cuernavaca Morelos, personas que se encontraban en el lugar aseguraron a varios medios de comunicación que algunos de los supuestos marinos se comunicaban en inglés.

No tenía sentido, porque los marinos eran mexicanos, y su idioma materno es el español. Sin embargo, el rumor de que había agentes estadunidenses en el operativo circuló en diversos medios, aunque las autoridades mexicanas nunca confirmaron ni desmintieron la especie.

Posteriormente trascendió que, ciertamente, habían sido elementos estadunidenses los que seguían a Arturo Beltrán Leyva vía satelital desde una semana antes, luego que éste se les escapara de un rancho, en el estado de Morelos, donde festejaba la Navidad de 2009, con conocidos grupos norteños, prostitutas, amigos y familiares. Según trascendió, tras ese monitoreo satelital lo ubicaron en el lujoso complejo habitacional donde fue masacrado.

La posibilidad de que agentes estadunidenses operen armados, es un secreto a voces que ni la PGR ni el Departamento de Estado de Estados Unidos han querido desmentir. “Nosotros tenemos conocimiento que así es, y al estar armados están violando la ley”, enfatizó Manuel Bartlett Díaz, coordinador de la bandada del PT, en el Senado de la República.

Según Bartlett, quien fuera secretario de Gobernación durante la administración del ex presidente Miguel de la Madrid -sexenio en que se arrestaron a  narcotraficantes como Rafael Caro Quintero, Ernesto Fonseca Carrillo, y Miguel Félix Gallardo-, en el PT tienen conocimiento de esa realidad, aunque no precisó en qué consistían esas pruebas.

“Desde hace mucho tiempo que (los agentes estadunidenses) están armados. Desde que se les otorgó todo el poder a las agencias de Estados Unidos, incluso desde antes”, sugirió Bartlett, entrevistado en el patio del Senado de la República.

Por ello, la posibilidad de que se legalice que agentes estadunidenses anden armados, dice, lo indigna.

“No se debe permitir que agentes de una fuerza extranjera actúen y anden armados en territorio nacional. Se estaría violando nuestra soberanía”, opinó el senador.

El pasado 24 de febrero, la Secretaría de Gobernación presentó un proyecto de ley firmado por el presidente Enrique Peña Nieto, solicitando al Senado de la República que se apruebe que agentes estadunidenses usen armas.

La iniciativa también propone que las visitas de diplomáticos, y funcionarios de alto nivel, puedan ingresar al país con su equipo completo de seguridad, incluyendo su armamentismo.

Sin embargo, la iniciativa generó una pronta controversia por lo delicado del tema, y la iniciativa rápidamente fue turnada por la Mesa Directiva del Senado a las comisiones unidas de Defensa Nacional y Estudios Legislativos, donde se sigue analizando la propuesta.

Para el senador Carlos Alberto Puentes Salas, coordinador de la bancada del Partido Verde Ecologista, la iniciativa debe ser estudiada y valorada antes de emitir un juicio sobre si ese proyecto de ley viola o no la Constitución.

“Es un tema que ya se han pronunciado en contra varios compañeros del senado, pero yo considero que antes de censurarse se debe de analizar a fondo la propuesta para analizar qué es lo que se busca, y si es viable, apoyarla”, dijo Puentes Salas.

“Hay rumores de que andan armados, pero es sólo eso: un rumor. No hay una denuncia formal, no hay nada. Sólo rumores, por eso debemos estudiar la propuesta para entonces decidir”, observó.

De acuerdo con los actuales acuerdos de colaboración bilateral que hay entre Estados Unidos y México, los agentes estadunidenses suministran información de inteligencia y entrenamiento a las corporaciones mexicanas, mientras que los mexicanos son quienes llevan a cabo las operaciones.

El acuerdo especifica que los agentes estadunidenses no deben de andar armados, para no violar la constitución mexicana que precisa que ningún natural extranjero podrá portar armas en el país, aunque la constitución podría tener un hueco, toda vez que no precisa un límite de agentes extranjeros que puede haber en México, número que tanto la PGR como Estados Unidos ha ocultado.

Brad Barker, presidente de la Corporación HALO, una compañía de seguridad privada que colabora en los rescates de personas secuestradas en México, dijo en una entrevista otorgada a El País, que el número de agentes estadunidenses ha subido mucho en México.

Fuentes de la DEA, negaron a Ríodoce que los agentes estadunidenses operen en México armados, aunque para Blartlett, agentes armados de la DEA, el FBI, ICE y otras agencias de Estados Unidos, son una realidad.

Otro de los puntos de la iniciativa es fortalecer el intercambio comercial y las relaciones diplomáticas de México, no sólo con estados Unidos, sino también con otras naciones, por lo que se prevé también la instalación de despachos conjuntos aduaneros y de pre-inscripción migratoria con los socios comerciales que tiene México.

Asimismo, aclara la iniciativa, no se autorizará la portación de un arma distinta a la que los agentes aduanales utilizan en sus respectivos países como arma de cargo, que deberá ser un revólver o pistola, cuyo calibre en ningún caso podrá ser superior a .40 o equivalente.

En cuanto a las visitas de alto nivel, sean funcionarios de Estado o de organismos internacionales, se propone que, por la naturaleza de sus funciones o investidura, puedan contar con mecanismos de protección y seguridad, con personal y equipo que los acompañan desde su país de origen.

María de los Dolores Padierna Luna, senadora del PRD, dijo que ella sólo apoyaría la iniciativa cuando se trate de la seguridad de una persona que viene a México, ya sea un mandatario o un líder internacional, pero que en cuanto a la posibilidad de que agentes extranjeros anden en México, se opondría, “porque se estaría violando uno de los principios estructurales de nuestra constitución”.

Y agregó:

“Como mucha gente, me he enterado de esos rumores de que agentes extranjeros que operan en México para sus embajadas, ya están armados, y es evidente que lo que busca el ejecutivo es legalizar esa práctica, pero al incurrir en ello, violan nuestra constitución.

“Por la vía de los hechos, violan nuestras leyes, y ahora simplemente están en vías de legalizar ello mediante esta petición que hace el ejecutivo”.

De aprobarse esta iniciativa, la cual será discutida en las próximas semanas, sería la Secretaría de la Defensa Nacional, la que emitiría las autorizaciones extraordinarias para los agentes extranjeros, por un plazo de hasta seis meses, en tanto que para el caso de las visitas de alto nivel sería durante el tiempo de estancia en el país.