En medio de una corte atiborrada de agentes de la DEA y del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), lo cual impidió el acceso de medios de comunicación, Ismael el Mayo Zambada, fue presentado hace una hora en una corte federal de Nueva York, donde tras leérsele los cargos por los que fue arrestado, se declaró no culpable.

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“No culpable”, dijo con una voz tenue y aguda, para un hombre de su edad y complexión.

Según reporteros que asistieron a la audiencia del otrora capo, Zambada García se obervaba visiblemente más viejo, tal vez de 88 años, y en peores condiciones de cómo aparece en la primera foto que le tomaron después de su captura, y ligeramente “sin nariz”.

“Obviamente lo miramos en una televisión de baja resolución, porque a los periodistas nos metieron en un cuarto contiguo, pero es claro que el hombre se mira muy acabado, incapaz incluso de sostenerse por sí mismo. Tal vez le ha afectado mucho el encierro, o es que acaso se trata de un teatro”, dijo una productora de National Geographic que cubrió la audiencia.

Frank Pérez, abogado de Zambada García, dijo que su defendido no colaboraría con el gobierno de Estados Unidos y que estaba dispuesto a irse a juicio para defenderse de todos los cargos de que se le acusa, para posteriormente aceptar un juicio rápido y sin mayores preámbulos.

Contrario a la primera audiencia preliminar hecha a Joaquín Guzmán Loera el Chapo, la corte no fue atiborrada de periodistas, sino que hubo cuando mucho 35, incluyendo los reporteros que normalmente cubren las cortes federales.

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