La Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) aseguró en su reporte 2024 que Ismael el Mayo Zambada, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, se encuentra en una incierta situación de salud.
Según la agencia estadounidense, el Mayo “no goza de buena salud“, lo que plantea dudas sobre la estabilidad de su liderazgo en la facción.
Esto se suma a un escenario de conflicto interno dentro del cártel, que la DEA describe como un modelo “sombrilla” compuesto por cuatro organizaciones delictivas distintas pero colaborativas entre sí.
Aparte de la facción liderada por el Mayo, los Chapitos, el Guano y Rafael Caro Quintero, se disputan el liderazgo.
Esta estructura separada, según la DEA otorga a los jefes la capacidad de compartir recursos; sin embargo, señala, no comparten ganancias ni tienen que responder a una cadena de mando principal.
La tensión dentro del cártel se ha exacerbado en los últimos años, según revelan informes de inteligencia tanto de la DEA como de fuentes militares mexicanas. Los Chapitos han surgido como una fuerza prominente, desafiando el liderazgo del Mayo y buscando consolidar su influencia dentro del cártel