Se reducen reclamos y quejas por afloramientos de aguas residuales, Japama
En la colonia Infonavit Arboledas, al poniente de Los Mochis, se dice con burla: Japama (Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome) realmente es innovadora, convirtió las calles en drenaje sanitario a cielo abierto, reduciendo costos de operación.
Aquí, entre las calles Independencia, Colegio Militar, Zacatecas y Tulipanes, respirar sin sentir nauseas es imposible. En esa zona, el concreto ya no es gris, sino verdoso. Cuando no hay aguas negras, hay un polvo blanco que se pega a las fosas nasales. Es cal, que los servicios sanitarios municipales arrojan a las calles para matar las bacterias fecales que se quedan como esporas y que de llegar a organismos humanos producen enfermedades diarreicas.
Aquí, los residentes están en un riesgo constante.
A unos metros de donde las aguas negras corren libremente, el ayuntamiento de Ahome inició su cruzada de reparación de drenajes sanitarios. El inicio de las obras se demoró una semana después de que el alcalde, Gerardo Octavio Vargas Landeros, anunció ante la burocracia municipal y unos cuantos residentes el arranque de la reparación de drenajes sanitarios. Cuando comenzaron las excavaciones, y la reposición, las mujeres se sorprendieron de que estaban colocando “unos tubitos” y no tubos. Ellas sospecharon que Japama jinetea y escamotea el dinero público, y dudaron de que el servicio sea eficiente en el futuro.
Durante la segunda semana de febrero, los frentes de Japama se extendieron a la colonia Stase IV, Juan Cota, Macapule y otras.
Héctor Hallal Zepeda, un profesionista estudioso del comportamiento del sistema de drenaje en Ahome, generador y promotor de la única propuesta de ley de drenaje pluvial que se encuentra detenida en el Congreso de Sinaloa, opinó que la reconstrucción del drenaje sanitario en realidad son parches que solucionan momentáneamente el afloramiento de aguas negras, pero que en el futuro inmediato se fracturará de nuevo, repitiéndose un problema, el tiradero de dinero público al caño.
“El asunto es que Japama repara en donde la población denuncia afloramientos, y sólo para terminar con las quejas, y no lo hace en puntos estratégicos que puedan ir resolviendo gradualmente los brotes, quizá porque no tienen un plan o porque hay incapacidad técnica para hacerlo. “Se habla mucho de diagnóstico, pero las obras que realizan demuestran que no lo tienen, que sólo son ocurrencias de alguien diestro en improvisación, pero carente de técnica”.
Hallal Zepeda opinó que esto ha pasado desde el 2018 hasta el 2024. “Y los problemas son los mismos: cero solución de fondo”.
Sostuvo que en la retenida ley de drenajes pluviales propuesta por ciudadanos, técnicos y científicos, se tiene una solución a los problemas de la ciudad de conducción de aguas residuales y superficiales, pero por alguna razón ha sido frenado por las diversas fracciones de diputados.
“La ciudad es plana, así es que las descargas se van lentamente y no como Guasave o Culiacán, en donde los ríos y arroyos cruzan por esas ciudades y se convierten en desagües naturales; en Los Mochis, esa característica no existe, por eso, los fundadores crearon redes de drenes para sacar las aguas, pero los modernos ingenieros y las autoridades municipales, estatales y federales resolvieron reducir las cubetas de estos y en otros casos construir tapones que generan remansos y rebrotes de descargas. Porqué nos ocurrió esto, por corrupción de funcionarios. En la ley propuesta se sancionan a esos funcionarios y se les obliga a resarcir el daño provocado. Quizá por eso, la propuesta no prospera”.
Bernardo Cárdenas Soto, gerente general de la Junta de agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome (Japama), aseguró que las obras iniciadas y generalizadas resolverán gradualmente el problema de escurrimientos del drenaje sanitario, y calculó que, para marzo, la paramunicipal tendrá un respiro por la disminución de quejas y denuncias por la conclusión de las obras.
Aseguró que en los siguientes tres meses se estarán iniciando y concluyendo 62 puntos, de 86 sectores detectados con problemas severos.
En la apertura de los drenajes se han encontrado tapones de grasas que al ser retirados dan fluidez a las aguas, pero en otros tramos la tubería prácticamente es inexistente al grado que estaban a punto de convertirse en socavones.
Ante las reparaciones anunciadas, dijo el funcionario, se incrementaron los reclamos de reparación, pero estos no podrán realizarse en la jornada de 90 días, porque no se asignó recurso.
Sin embargo, anunció que en cada queja hay una propuesta: crear consejos ciudadanos que ayuden en la recuperación de cartera vencida con el compromiso de que los recursos captados se invertirán en esa colonia en específico. Hay reparaciones de 300 mil pesos que no se ejecutan porque no hay recurso, pero si se reduce la cartera se podrían realizar.
