Gilberto López Alanís murió este viernes en esta ciudad de Culiacán. Con él se va una parte importante de la historia de Sinaloa. Fue un prolífico autor que rescató a los personajes y espacios de la región.
El maestro fue el primer director del Archivo Histórico de Sinaloa, desde 1999 hasta 2021.
Entre su vasta obra de investigación histórica se encuentra; Culiacán, 1920; Culiacán, confluencia de ríos y hombres; La comunidad primitiva en el Noroeste; Invasión y conquista en el Noroeste; Monografía del estado de Sinaloa (colectiva); Apologético y puntual manifiesto (versión paleográfica); Chiametla hasta el siglo XVII, un acercamiento; Madero y los sinaloenses.
Además de El rojo dulce de la espina; Nicolás T. Bernal, amistad y compromiso revolucionario; Contrastes y evidencias de una historia, 1972-2002, documentos, documentos, testimonios y entrevistas; Ciudad Universitaria: Culiacán, utopías y realidades; General Miguel Armienta López, un soldado de la Revolución.
López Alanís coordinó la Colección 18 Encuentros con la Historia y actualmente un programa semanal de charlas de historia, en La Chuparrosa Enamorada y era parte del programa De la sierra al mar.
El investigador e historiador, quien falleció cuando estaba siendo atendido en una clínica privada luego de sufrir un pre infarto, nació en 1944, en la ciudad de Guamúchil, fue un apasionado de la historia y de su difusión.