Los laboratorios privados no informan; hay decenas de miles de positivos sin registro
La omisión se institucionalizó. Así lo consignó el secretario de salud Héctor Melesio Cuen Ojeda y una estadística a la que día a día le añaden más asteriscos para advertir rezagos en los registros de casos de COVID-19 y fallecimientos.
De manera oficial enero habría culminado con 26 mil 828 casos de coronavirus, sin embargo la cifra no es confiable. El propio secretario lo admite. Desde el domingo 6 de febrero, la dependencia de salud comenzó a consignar el rezago y la omisión en el reporte de nuevos casos por parte de laboratorios privados en Sinaloa. Casi todos.
“Ustedes recordarán que yo siempre fui un crítico muy fuerte de la administración anterior, y aun así estando yo en la administración hice un comentario muy fuerte, que hay que estar multiplicando por tres, cuatro, cinco lo que se está reportando, ese fue el comentario que hice en su momento, esto a raíz de lo que yo veo, sin embargo puedo comentar que después de una investigación vimos que los laboratorios privados no están reportando.
-¿Ninguno?
“Pues prácticamente nadie, o sea, prácticamente, y muchas veces no es de mala fe y ahorita les voy a decir por qué, no es de mala fe porque los laboratorios sí están reportando pero lo están reportando a la Secretaría de Salud, al CRUM, aquí lo raro de todo esto es que tiene años porque la pandemia tiene años, que se queda aquí encerrada la cifra y yo en su momento denuncié que todo esto era para mantener de manera ficticia un color determinado en el semáforo de riesgo epidemiológico, así lo dije en su momento”.
Ese reporte del domingo 6 por parte de la Secretaría de Salud advertía que entre el 20 de enero y el 4 de febrero, un solo laboratorio privado en el estado realizó más de 40 mil 500 pruebas para diagnóstico de COVID-19 las cuales no se reportaron a la plataforma del sistema de vigilancia epidemiológica SISVER.
Y de este total de pruebas realizadas 17 mil 199 resultaron positivas.
La cifra por sí sola dice poco, sin embargo, la explicación del secretario Héctor Melesio Cuen Ojeda brinda un contexto totalmente diferente.
“Por ejemplo un solo laboratorio, nosotros estamos reportando en los últimos 16-18 días alrededor de 16 mil casos positivos en la Secretaría de Salud, y un laboratorio privado tiene 17 mil”, señala.
Esta situación, según explica Cuen Ojeda, repercute al momento de hacer el análisis de la información.
La punta del iceberg
En julio de 2020 la estadística oficial presentó el primer rezago. El miércoles 3 el informe diario reportó 130 fallecimientos de los cuales 17, según el documento, correspondían a ese día y el resto no se precisó la fecha.
Esa fue la tendencia de la pasada administración. En cada una de las tres olas que azotaron al estado, la Secretaría de Salud administró el reporte de contagios y de muertes, los cuales dio a conocer en fechas posteriores bajo diferentes argumentos.
Y más recientemente el problema otra vez surge. La cuarta ola y la variante Ómicron otra vez desnudan las deficiencias y tuvo que ser la misma Secretaría de Salud la que hizo el señalamiento al problema.
“Eso es lo que siempre hemos reclamado, lo raro es que llegaba aquí a lo que es la dirección de promoción y prevención y ahí se quedaba, lo raro es que no dijeran si estos son positivos, ¿por qué no se reportan?”, cuestiona Cuen.
Uno de los rezagos más considerables se vivió en 2021 justo en veda electoral. Sinaloa vivía el proceso para renovar los 18 ayuntamientos, al congreso local y al gobierno estatal. La incidencia diaria de casos de coronavirus y los fallecimientos cayó drásticamente durante mayo, justo en la recta final de las campañas.
Los casos pasaron de casi mil 750 y a 387 muertes en abril de ese año a mil 210 casos y 181 muertes en mayo, pero el 28 de junio tuvimos otro rezago.
Ese día el informe diario registró mil 219 casos después de mantener un promedio diario de 67 contagios y al final del mes la estadística casi triplicó los casos de mayo para culminar con 3 mil 150.
Y un mes más tarde, pasadas las elecciones, el desastre. Sinaloa pasó de tener en promedio menos de 100 casos cada 24 horas a casi 500 durante julio, mes que culminó con 15 mil 236 casos.
Pero la realidad puede ser otra. Al menos así lo deja entrever el nuevo subregistro que la Secretaría de Salud reporta a partir del 5 de febrero. Lo explica Melesio Cuen:
“Nosotros hicimos una investigación, tanto peca el que mata la vaca como quien le agarra la pata; por un lado los laboratorios privados no se reportan a la plataforma SISVER y por otro lado aquí, al interior de la secretaría se reporta y por qué no paran antenas, ¿qué está pasando? Porque hay una costumbre, una costumbre que viene desde atrás, una costumbre donde ahí se quedaban las cifras, una costumbre donde ahora estamos sacando muertes de antes, una costumbre donde las cifras son irreales”, añade.
Al corte del jueves 10 de febrero, laboratorios privados no habían registrado 19 mil 104 casos positivos al COVID-19 desde el 20 de enero.
“Para poder tomar decisiones correctas necesitamos datos correctos”, dice Melesio Cuen.
“Los datos precisamente son porque mucha gente no está reportando. Si a esto le sumamos las pruebas que se hacen en casa, las que se hacen en farmacias, las pruebas que se hacen en muchos laboratorios que no reportan, que no hacen PCR pero que sí hacen la del antígeno, porque la mayor parte de la positividad es en torno al antígeno porque es más fácil, es más barata, y porque es rápida esta prueba”, señala.
En total, los primeros 40 días del año han dejado más de 33 mil 500 nuevos casos de COVID-19 reportados de manera oficial, cifra que podría quedarse muy corta.
Artículo publicado el 13 de febrero de 2022 en la edición 994 del semanario Ríodoce.
