Empleada descontenta provocó una explosión dentro de un depósito de petróleo, causando daños por más de un millón de dólares.
Dijo que ya estaba cansada de que su jefe (Pipat Ungprapakorn) de 65 años, se quejara con ella todos los días, lo cual le generaba mucho estrés.
De acuerdo con grabaciones de las cámaras de seguridad de CCTV, Ann Sriya, de 38 años, quien era la gerente del almacén, entró a la bodega de Prapakorn Oil, en la provincia de Nakhon Pathom, en Tailandia, y prendió fuego a un trozo de papel que después arrojó sobre un contenedor de combustible. Después de retirarse, dicho contenedor explotó.
Los hechos ocurrieron el pasado 29 de noviembre. Sriya declaró que había trabajado en el depósito durante nueve años y actuó de esa manera por venganza, también dijo a las autoridades que no creyó causar ese nivel de daños.
Además de la pérdida del millón de dólares que causó por incendiar el depósito, las llamas causaron daños a más de 10 casas aledañas.
Los bomberos tardaron alrededor de cuatro horas en contener el fuego que se propagó rápidamente, ya que al interior del depósito había material inflamable. Para sofocar el incendio se utilizaron más de 40 camiones de bomberos.
Además, se tuvieron que realizar labores para evitar que el aceite quemado se derramara en un canal y llegara a una zona residencial cercana.
Según wikisoon.com, una aldeana llamada Sirasini sufrió quemaduras en el brazo y fue trasladada de urgencia al hospital. Ahora está fuera de peligro.
La policía arrestó a Sriya, quien confesó el pasado 1 de diciembre haber provocado el incendio en la bodega (con información de Proceso).
