En Culiacán fue detectada una red que contrata a personas para que cobren remesas, a cambio de un pago.
De acuerdo a investigaciones realizadas por Televisa y el Sol de México, el modus operandi es que el organizador de la red contacta a grupos de personas, las lleva hasta las sucursales bancarias, donde cobran remesas que van de los 12 a 14 mil pesos, de personas que trabajan en Estados Unidos, pero que no son sus familiares.
“El amigo de un amigo me habló y me dijo que si quería recibir un depósito y que me iban a dar dinero por cierta cantidad”, narró Roberto a Televisa.
El sujeto entrevistado, de acuerdo a la publicación, vive en Culiacán y forma parte de una red de 10 amigos que recibía envíos de dinero provenientes de EU, pese a que ninguno tenía familiares viviendo en aquel país.
“Cuando yo iba íbamos aproximadamente de cuatro a seis, Los que cabíamos en un carro. Llegaba a Bancoppel y les decía que tenía que hacer un retiro de un envío. Le presentaba mi IFE, daba el código, me entregaban el dinero. Yo se lo daba a la persona y esa misma persona me daba la comisión.
Por cada envío de dinero que cobraba, a Roberto le pagaron 300 pesos.
Otro sujeto contactado por la red, es Andrés, quien también vive en Culiacán. A él le propusieron recibir los envíos a través de depósito en una cuenta bancaria. A él lo contactó un conocido y le propuso ganar dinero a cambio de que recibiera depósitos en su tarjeta. La comisión para él era de 500 pesos.
“Conocidos jalan a conocidos porque igual te ganas un dinero en minutos. En un apuro que tenía yo en mi casa de salud y necesitaba dinero de ya y me hablaron, me dijeron y yo dije si, ocupo el dinero y ya”, dijo Andrés a Televisa.
Para retirar el dinero de remesas, la persona sólo debe presentar su identificación y comprobante de domicilio.
“Era aproximadamente de dos a tres veces por mes. Nada más me pedían mi credencial de elector, mi nombre y ya nada más me hablaban y me que fuera a retirarlo. Me daban un número de rastreo o código”, mencionó Roberto.
De acuerdo a El Sol de México, en una sucursal bancaria de la sindicatura de Costa Rica, el fenómeno es muy común, y entre los que hacen fila para cobrar remesas son jóvenes con radios de frecuencia.
“Al interior del banco, ubicado sobre avenida Independencia, espera un hombre con una mariconera en la que va recolectando parte del dinero cobrado en cajas”, señala el reportaje.
En otras ocasiones son amas de casa a quienes les ponen el depósito con cantidades variables. “Una vez me tocó una señora que ni siquiera sabía quién le mando el dinero y una amiga que la acompañaba le dijo: ‘pues dile que tu hijo que trabaja allá’”, relata una empleada al periodista de El Sol.
Con 6.15 por ciento de los hogares recibiendo remesas y apenas 1.25 por ciento con miembros que emigraron a Estados Unidos entre 2015 y 2020, Culiacán es considerado por el Consejo Nacional de Población (Conapo) como un municipio de intensidad migratoria baja.
Y sin embargo, la capital sinaloense es el séptimo municipio que más remesas captó en 2020, y ahora ya es el sexto: 370 millones de dólares el año pasado y 210 millones entre enero y junio de 2021.
Son 20 los municipios que concentran la quinta parte de los envíos, pero ninguno está clasificado como de alta intensidad migratoria. No obstante, sí existe algo común a buena parte de estos: son zonas con fuerte presencia del crimen organizado.
Encabezan la lista Tijuana, Guadalajara, Puebla, Morelia, Ciudad Juárez, Culiacán, León, Zapopan, Oaxaca, Monterrey y San Luis Potosí.
Esta coincidencia hace pensar a los especialistas que la mano del crimen podría estar detrás de ese mar de transferencias monetarias para blanquear dinero tras el cierre físico de las fronteras, por donde cruzaban el dinero en efectivo.