Un “piquete” de soldados que recién fueron acantonados en Choix para la destrucción de plantíos de mariguana y amapola saquearon dos viviendas para armar su propia base de operaciones.
Los soldados robaron la despensa alimenticia de dos familias, dos refrigeradores, una lavadora y un par de sillas de montar, en el Saucillo, Choix, en los límites con Santa Gertrudis y San Vicente, Chihuahua, la mañana de este lunes (4).
Tras el saqueo y retirada de los soldados, los afectados reportaron el caso al 911, pero no actuaron. Por el contrario, la central de comunicaciones remitió el número telefónico a los soldados desvalijadores y estos comenzaron a hostigar a los denunciantes y hasta los amenazaron con tomar represalias si persistían en las denuncias.
La cosa pasó a mayores cuando un capitán de apellido Goycoechea pidió telefónicamente detener las denuncias.
Incluso, el jefe de la policía municipal de Choix le aseguró a los denuncias que las denuncias tendrían consecuencias en su contra, pues en operativos subsecuentes arrasarían con los pueblos hasta encontrar a la persona que acusó a los soldados.
Las casas saqueadas estaban momentáneamente solas, pues sus morados las desocuparon abruptamente cuando descubrieron que los soldados se acercaban.
Aquí, a los militares se les considera malas personas, narcotraficantes y gatilleros, pues la fuerza castrense se alquila para hacer el trabajo sucio de un grupo delictivo leal al Cartel de Sinaloa.
Los ofendidos pidieron reservar sus identidades ante el temor de los soldados y la policía municipal cumplan sus amenazas de desaparecerlos.