Hace ocho años, el entonces gobernador Mario López Valdez y el alcalde de Navolato, Evelio Plata Inzunza, se tomaron la foto para anunciar la construcción del nuevo Palacio Municipal. Ahora bajo la batuta del alcalde Eliazar Gutiérrez Angulo, el inmueble entra finalmente en funcionamiento con un largo historial de observaciones, algunas por parte de la Auditoría Superior del Estado.
Poco antes de que el gobernador Quirino Ordaz Coppel encabezara la ceremonia formal de inauguración del edificio, el alcalde Eliazar Gutiérrez Angulo reconoce que el tema de la inversión de los recursos en este inmueble ha sido muy debatido por la sociedad.
El actual alcalde fungía durante el gobierno municipal de Evelio Plata, como síndico procurador, y afirma que no vio ninguna irregularidad en la inversión.
Ante las advertencias del ex alcalde de Navolato y actual diputado, Marco César Almaral, que solicitará una auditoría específica para revisar diversas irregularidades, entre ellas la presunción de desvíos de recursos públicos, asegura que está en toda la disposición de que se investigue la inversión.
El historial del nuevo Palacio Municipal de Navolato inició en febrero de 2013. El diputado integrante de la Comisión de Fiscalización precisa que el primer delito que se cometió fue construir sobre un terreno que era propiedad de particulares, en lugar que fuese del gobierno municipal o estatal.
La regularización de la propiedad del terreno en donde está asentado el nuevo Palacio Municipal de Navolato, ahora llamada oficialmente Unidad Municipal de Gobierno, se concretó apenas durante el presente trienio de Eliazar Gutiérrez Angulo.
La condición para cambiar las oficinas era precisamente que el inmueble fuese totalmente propiedad del gobierno municipal, tanto el terreno como la construcción.
La construcción se inició con la donación de una parte del terreno, pero luego se hizo uso de una área adicional, la cual se trabajó bajo la promesa de venta. Se trató de una diferencia de 2 mil metros cuadrados que no estaban incluidos en el acuerdo inicial, explica.
Como no estaban las escrituras debidamente finiquitadas por la diferencia en la superficie del terreno, fue entonces que se entrampó el caso.
Durante la alcaldía de Eliazar Gutiérrez Angulo, el gobernador Quirino Ordaz Coppel debió intervenir con los empresarios dueños de los terrenos. Se logró el acuerdo consistente en una donación de la superficie de 2 mil metros cuadrados para aprovechar el inmueble que ya había sido construido y estaba siendo desmantelado por los vándalos.
En el proyecto inicial anunciado en 2013, la edificación de la hoy Unidad Municipal de Gobierno representaría una inversión total de 56 millones 250 mil pesos, de los cuales 11 millones serían aportados por el gobierno municipal. La inversión estatal sería con los recursos de un megacrédito que el gobierno de Mario López Valdez había obtenido con un bolsa total de 2 mil 600 millones de pesos en obras diversas en la entidad.
Tras los años de abandono del edificio, que estaba sobre un terreno de particulares, se buscó fuese funcional y se convirtiera un patrimonio que ya suma 110 millones de pesos de inversión, cuando inicialmente se había anunciado que implicaría solamente 56 millones de pesos.
El diputado Marco César Almaral Rodríguez cuestiona que ni el gobernador Mario López Valdez ni el entonces alcalde Evelio Plata debieron dedicar una inversión millonaria sobre un terreno propiedad de particulares, situación que considera totalmente irregular, y que el actual alcalde, que en ese entonces fungía como síndico procurador, debió haber detectado.
Durante este trienio le tocó al gobierno municipal aportar 79 mil pesos por concepto del costo de escrituración, más nueve millones que aportó el gobierno estatal para el rescate y la rehabilitación de las instalaciones que habían estado abandonadas.
Las posiciones del ex alcalde de Navolato, Marco César Amaral Rodríguez y el actual, Eliazar Gutiérrez Ángulo, son diametralmente opuesta sobre la necesidad del nuevo edificio.

Almaral Rodríguez opina que no era necesario construir una nueva sede para albergar las oficinas ya que el Palacio Municipal, localizado frente a la Plazuela de Armas, en el corazón de la cabecera municipal fue construido con visión de futuro para agregar un cuarto nivel si fuese necesario. La construcción fue realizada en 1998, durante su trienio con el respaldo de una encuesta previa para conocer la opinión de la ciudadanía sobre dónde deseaba que se construyera.
En cambio, Eliazar Gutiérrez Angulo argumenta que era necesario contar con una nueva sede para las oficinas del gobierno municipal, porque las que se tenían eran poco funcionales para dar una atención digna a la ciudadanía. Existían funcionarios que ni siquiera contaban con un espacio ni escritorio propio, o bien se alternaban con otro compañero.
En 2015, Ríodoce documentó que después de dos años del anuncio formal de los trabajos de construcción del nuevo Palacio Municipal de Navolato, la Auditoría Superior del Estadio no había encontrado registros contables, ni evidencia de la aplicación de los 11 millones 250 mil pesos en la edificación.
El diputado asegura que todavía no existe evidencia de dónde quedaron los 11 millones 250 mil pesos.
El actual acalde reitera que no tiene ningún inconveniente que se realice una auditoría específica para que los funcionarios involucrados solvente cualquier irregularidad.
Cuando llegó la actual administración municipal, el nuevo Palacio Municipal estaba en el abandono. “Yo no si siquiera conocía el edificio por dentro”, comenta el actual alcalde.
En un primero momento pensaron que no estaban las instalaciones a cargo del gobierno municipal, pero posteriormente encontraron un acta en donde en donde se contaba que se había recibido, pero los propietarios del predio daban cierta vigilancia
El edificio que había venido funcionario como Palacio Municipal ahora será convertido en un espacio cultural.
El actual alcalde señala que los propietarios de los terrenos colindan con la Unidad Municipal de Gobierno ya están esperando que la zona detone su actividad económica, en tanto que Almaral Rodríguez infiere las oficinas fueron cambiadas precisamente para beneficiar a los propietarios que pudieran ser personajes relacionados con la política.
Aunque el presidente municipal se resiste a expresar “un borrón y cuenta nueva y cosa del pasado”, asegura que si hay algo que hacer, si no ha prescrito, no está opuesto ni cerrado a ninguna investigación.
Enfatiza que estaría en toda la disposición y de aclarar si como síndico procurador tuvo una situación que le faltó investigar de fondo, porque en ese momento era una figura jurídica nueva que no entraba del todo en el tema de la supervisión y la vigilancia.

Artículo publicado el 05 de septiembre de 2021 en la edición 971 del semanario Ríodoce