La empresa Hertz que se dedica a la renta de vehículos se declaró en quiebra hoy, sumándose a los estragos de la pandemia de Covid-19 en Estados Unidos, el país más afectado en el mundo.
Hertz era la compañía líder en el sector a nivel nacional, sin embargo, la deuda que acumuló por más de 19 mil millones de dólares le impidió mantenerse en pie, publicó Eje Central. A las deudas se le suman los más de 600 mil automóviles que no han podido ser empleados por la suspensión de actividades en el país.
La pandemia de Covid-19 detonó la mala situación financiera por la que atravesaba Hertz, quien desde hace tiempo ya mostraba síntomas de fallas en su financiamiento. En 2019 perdió 58 millones de dólares, lo que representó su cuarto año consecutivo con pérdidas económicas.
Hertz se vio minimizada por la aparición de competidores como Avis Budget Group, Enterprise Holdings, Uber Technologies y Lyft, lo que redujo su presencia en el mercado.
La empresa depositó sus esperanzas de evitar la liquidación forzosa de sus automóviles en el proceso legal del capítulo 11 que inició en el Tribunal de Quiebras de Wilmington, en Delaware; no obstante, fue insuficiente.
Con la bancarrota de Hertz, precipitada por la caída en el tráfico terrestre durante la pandemia, se presenta uno de los incumplimientos corporativos más significativos en esta contingencia sanitaria.
Hertz inició operaciones en al alquiler de automóviles en 1932, en el aeropuerto de Midway, aunque su fundación data de 1918 en Chicago, como Rent-a-Car.
Hace 15 años Ford Motor vendió la compañía por más de 5 mil millones de dólares a un consorcio liderado por Clayton Dubilier & Rice.