Después de que se enfrascaran en una discusión en la cámara baja, en la que los gritos salieron a relucir, Porfirio Muñoz Ledo aseguró que con Gerardo Fernández Noroña lo une la lucha por la libertad de expresión y aunque no lleva una relación de amistad con él, sí es correligionario.
El presidente de la Cámara de Diputados indicó que aunque ha habido diferencias en temas como las asistencia, están elaborando un nuevo estilo de trabajo, “más ordenado, eficaz y que privilegie el trabajo legislativo”, publicó Reporte Índigo.
Al referirse a Noroña, expresó que ha luchado por mejorar las condiciones de los trabajadores de la cámara y por eso “no habrá más tercerización ni outsourcing” y reveló que le propuso que en San Lázaro se hiciera un homenaje al Nigromante.
Por su parte, Fernández Noroña señaló que seguirá siendo crítico y siempre debatirá los asuntos en tribuna “porque es algo legítimo”.
Sin embargo, dijo que platicó con Muñoz Ledo, quien es su compañero de muchos años y asumieron que la unidad es importante.
El legislador de Morena y presidente de la cámara baja aseguró que la conferencia conjunta no fue a petición de Andrés Manuel López Obrador y dijo que a él sólo le jala las orejas “su abuelita”.
Fernández Noroña explicó que la conferencia fue a petición de él para mostrar que no hay problemas y recordó cuando Muñoz Ledo increpo a Miguel de la Madrid en la misma cámara, por lo que lo calificaron de insolente, al defender la libertad que debe haber para cuestionar el trabajo de los demás.
Durante la primera sesión de trabajo en la Cámara de Diputados, el pasado martes, se vivió un encontronazo entre los legisladores ante el cuestionamiento de Noroña a Muñoz Ledo sobre su asistencia al mensaje del presidente Enrique Peña Nieto con motivo de su sexto y último informe de Gobierno.
