Estadio Caliente, Tijuana – Raúl Gudiño salió decidido a tener un gran debut con Chivas en la Primera División, pero errores defensivos le arruinaron la noche y el Rebaño comenzó el Apertura 2018 con una derrota 2-1 ante los Xolos de Tijuana, en el primer partido de la era José Saturnino Cardozo.

La mesa estaba puesta para que el Guadalajara saliera de Tijuana con al menos un punto gracias a las buenas atajadas de su guardameta, pero el canterano chiva no contaba con que su zaga le jugaría chueco; dos desatenciones sepultaron la esperanza rojiblanca en este inicio de torneo.

El duelo fue movido con acciones en ambas porterías y Gudiño sacó al menos tres de gol. Además, la fortuna estuvo de su lado cuando un disparo se estrelló en el poste en el comienzo del juego.

Al minuto 11’, Luis Chávez cimbró la cabaña de Gudiño con un zurdazo. Luego, al 27′, el mediocampista jalisciense remató dentro del área y exigió al joven portero, quien respondió bien en el fondo.

El primer gol cayó al 53’ en un tiro de esquina. Los fronterizos aprovecharon el balón parado y, tras un primer cabezazo de Eric “Cubo” Torres, apareció Juan Martín Lucero para poner el 1-0 ante una defensa rojiblanca muy benevolente.

Sin embargo, poco duró el gusto. Al 58’, Josecarlos Van Rankin logró su primer tanto como jugador de Chivas al vacunar a Lajud con disparo cruzado. Dos minutos después, le fue anulado un gol al Cubo Torres por fuera de lugar.

Al 63’, Gudiño salvó de nuevo a su portería al atajarle un disparo a Chávez y, cinco minutos después, su pie no permitió que el balón entrara cuando ya se cantaba el segundo en la frontera.

A partir de ahí Xolos apretó y, al 72, Gudiño rechazó otro remate, aunque al 74’ Rivero encontró la fórmula para batirlo y darle el triunfo a los de Tijuana.

Rivero cerró la pinza luego de un balón peinado por el Gato Lucero en una jugada muy similar a la del primer gol.

Chivas terminó con 10 hombres por la expulsión de Michael Pérez al 79’. El mediocampista perdió la cabeza y le tiró una patada a Omar Mendoza, que el árbitro no pasó por alto. (Mediotiempo)