El gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, quien llegó a su cargo cobijado por el PAN en 2010, se negó a opinar sobre la investigación interna que se lleva a cabo en el partido político y que podría llevar a la expulsión del diputado Guadalupe Carrizoza y la disolución del Comité Ejecutivo Estatal.
Entrevistado al concluir la inauguración de la Expo Agro 2016, López Valdez aceptó que este partido lo apoyó en su candidatura y le ayudó a cogobernar pero aseguró que él es un político ciudadano, por lo que rechazó opinar al respecto.
“Yo no me he puesto la camiseta más que de los ciudadanos y eso no significa que voy a descalificar o atacar a otros partidos. Algunos tendrán dificultades en algún tiempo y esas son historias que habrán de corregir sus propios miembros”, expresó el mandatario.
El panismo sinaloense se encuentra sumergido en la discusión sobre quien o quienes habrían apoyado la candidatura en 2013 de la legisladora por Cosalá, Lucero Sánchez López, a quien la PGR investiga por haber falsificado sus identificaciones para ingresar al penal del Altiplano y visitar al narcotraficante Joaquín Guzmán Loera.