México requiere de gobiernos con más legitimidad; dice la vicecoordinadora del PAN, Mariana Gómez del Campo.

La Senadora del PAN, Mariana Gómez del Campo Gurza, propondrá reformas al 81 constitucional para que en las presidenciales del 2018 se establezca una segunda vuelta electoral a fin de fortalecer el régimen democrático y la legitimidad del candidato que resulte ganador.

Argumenta la también vice coordinadora de la bancada del PAN en el Senado, que el actual presidente resultó electo por el 38.21 por ciento de los votos emitidos, lo que quiere decir que en los hechos fueron 19 millones de mexicanos los que lo eligieron para gobernar una población de 112 millones de mexicanos.

A lo anterior, explicó, se suma que la aprobación de Enrique Peña Nieto ha caído a su nivel más bajo desde que inició su mandato, al registrar únicamente 34 por ciento de la aceptación ciudadana, mientras que entre los líderes de opinión sólo alcanza 15 por ciento.

En conferencia de prensa, Gómez  del Campo anunció que propondrá reformar el Artículo 81 de la Carta Magna ante el aumento de la competencia electoral y los cada vez más estrechos márgenes para definir al triunfador, lo que ha provocado que el país sea gobernado por mandatarios por los cuales la mayoría de los mexicanos no votó.

“En 1976 la diferencia entre el primer y el segundo lugar rondaba el 87 por ciento; en el 88 el margen con el que se ganó fue del 19.56 por ciento; en 2006 se tuvo la contienda más competitiva de la historia, donde la distancia fue de apenas el 0.56 por ciento. En 2012 la diferencia que muchas casas encuestadoras señalaban que resultaría superior al 10 o 15 por ciento, terminó siendo del 6.62 por ciento”, advirtió.

La iniciativa que presentará en los próximos días al Senado, dijo, es producto de una reflexión de lo que pasa con la democracia mexicana, en la que “hace falta que maduremos en muchos sentidos, que nos modernicemos también, que podamos tener un Presidente mucho más fuerte”.

En ese sentido, la vicecoordinadora general de la bancada del PAN mencionó que la reforma constitucional prevé la segunda vuelta electoral en caso de que ningún candidato obtenga el 50 por ciento más uno de la votación válida emitida en la primera vuelta.

Aseguró que la implementación de esta figura es benéfica para generar mayor estabilidad política, lo que, incluso, podría traducirse en acuerdos, alianzas o coaliciones legislativas de largo aliento.

La senadora resaltó que de acuerdo con el politólogo Giovanni Sartori, la segunda vuelta electoral es un mecanismo que ofrece numerosas ventajas para nuestra vida democrática, como es la posibilidad de que el elector de reoriente su voto en una segunda oportunidad.

De igual manera, remarcó que la segunda vuelta fortalece el mandato del presidente al recibir el apoyo de más de la mitad del electorado, con lo que se disminuyen las eventuales polarizaciones o crisis de legitimidad democrática.

Destacó también que la implementación de este tipo de sistema electoral ha sido incorporado en el  67 por ciento de los países que eligen a su presidente de manera directa, como son: Francia, Austria, Brasil, Rusia, Chile y Polonia, entre otros.

Y en América Latina todas las naciones, a excepción de cuatro: México, Panamá, Paraguay y Honduras, han abandonado el método de elección por mayoría simple para adoptar sistemas electorales que contemplan mayorías absolutas, con lo cual se evita que se ponga en duda la legitimidad de quien resulta electo, resaltó

De cara al proceso electoral 2018, estoy convencida que tenemos que hacer un nuevo arreglo institucional, requerimos de una presidencia fuerte, que ésta no sólo la gane quien tenga más votos, sino también quien cuente con el respaldo de la mayoría de los electores, esto hace que no se polarice tanto un proceso electoral como nos ha ocurrido en los dos últimos procesos electorales en nuestro país, concluyó.