MÉXICO, D.F., (proceso.com.mx).- El coordinador de los diputados federales del PAN, Luis Alberto Villarreal, justificó su presencia en una fiesta con trabajadoras sexuales: “Asistí como invitado a un evento privado, fuera de cualquier actividad relacionada con la reunión plenaria”.
En su defensa, Villarreal sostuvo que el grupo parlamentario del PAN no pagó con recursos públicos la parranda celebrada en enero pasado en una mansión de Puerto Vallarta, Jalisco, y difundida ayer en un video por el periódico “Reporte Índigo”.
En una carta enviada a dicho medio y publicada también en su cuenta oficial de Twitter, Villarreal refuta:
“Lamento el uso en política de grabaciones ilegales que tienen por objeto dañar a las personas y su vida privada. En su momento exigiré a las autoridades la investigación del origen de las propias grabaciones y ejerceré las acciones penales correspondientes”.
Este martes, “Reporte Índigo” publicó que la fiesta fue organizada por Edelmiro Sánchez, quien fue detenido en 2004 en Nuevo León, acusado de traficar 87 kilogramos de mariguana, y de estar implicado en el homicidio del diputado local panista Hernán Belden.
Ante este escándalo, el presidente nacional del PAN adelantó ayer que perfila la destitución de Villarreal, misma que dará a conocer mañana miércoles debido a que “los comportamientos particulares de los militantes de Acción Nacional deberán tener consecuencias cuando afecten la imagen y vida de nuestro partido”.
