Marta Hurtado, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, fue cuestionada sobre la más reciente investigación de Ejército Espía, que documenta la existencia del Centro Militar de Inteligencia y el seguimiento ilegal a las comunicaciones del activista Raymundo Ramos.
Hurtado respondió que es un caso muy serio y preocupante, ya que las personas defensoras de derechos humanos son cruciales para cualquier sociedad democrática .
También reconoció que los servicios de inteligencia juegan un papel importante en la protección del Estado, pero recalcó que cualquier acción de vigilancia debe servir a un propósito legítimo, ser justificadas, lícitas, necesarias y proporcionales.
“Todas estas intervenciones de vigilancia deben estar autorizadas por la legislación nacional y claramente no contravenir la Constitución”.
Sostuvo que la rendición de cuentas juega un papel especial ante el aumento de tareas de las fuerzas armadas en México.
“Permítanme también decir que, dado el papel cada vez mayor de las Fuerzas Armadas en México, es realmente crucial y urgente que los servicios de inteligencia en México estén regulados con un mecanismo de supervisión civil, [que] debería crearse para controlar, y eventualmente tomar medidas de rendición de cuentas sobre los mismos”.
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