La secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, explicó que los nacionales mexicanos cruzan la frontera con Guatemala por los constantes enfrentamientos entre dos bandas, y ahora preocupa a las familias que se ha empezado a reclutar a los hombres jóvenes.
En información publicada por Proceso se detalla que los mexicanos desplazados se han ido de Amatenango desde el 23 de julio, cuando un grupo de 400 personas que cruzaron la frontera y llegaron al municipio de Cuilco, en Huehuetenango, donde se resguardaron.
El gobierno mexicano está agradecido con Guatemala porque han recibido muy bien a todos quienes han cruzado.
El Gobierno de Guatemala ha entregado certificado de permanencia humanitaria a 207 mexicanos por 30 días para que puedan trabajar en la región.
Los datos que ofreció es que en Monte Rico hay 30 personas; en Nueva Reforma, 247; en la Unión La Frontera, 10; en Jocotitlán de las Pilas, 23; y en La Playita, 10 personas.
Los tres cónsules de México en Guatemala se trasladaron a Cuilco y encontraron que la población desplazada en su mayoría se dedica sembrar maíz.
La mayoría de la población prefiere permanecer en territorio de Guatemala para estar muy cerca de sus comunidades y no perder sus propiedades y animales, en lugar de aceptar del gobierno mexicano el traslado a un albergue en Tapachula.
En una estrategia de Sedena y el gobierno de Guatemala se busca darle protección a las comunidades afectadas, en tanto que 61 persona ya han regresado a sus hogares por voluntad propia.