A un año de que los cumpla en el Altiplano

Un Tribunal Colegiado ratificó la sentencia del secretario particular de Joaquín el Chapo Guzmán, Carlos Manuel Hoo Ramírez, un año antes de que la cumpla.

Hoo Ramírez fue condenado a 10 años por el delito de delincuencia organizada y 250 días de multa, que empiezan a contar desde 2014, cuando fue detenido.

El Cóndor fue capturado junto con el Chapo el 22 de febrero de 2014 en los condominios Miramar, en Mazatlán.

La Fiscalía General de la República acusó al Cóndor de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud.

Según la FGR, Hoo Ramírez era el secretario particular del Chapo y el hombre más cercano a él.

Durante el proceso penal presentaron declaraciones de testigos protegidos que formaron parte del Cártel de Sinaloa.

Con las pruebas acreditaron que el grupo delictivo existe por lo menos desde 1997, con jerarquías, responsabilidades y actividades diversas entre sus integrantes, encabezada o dirigida, entre otros, por el Chapo Guzmán.

Uno de los testigos declaró que el Cóndor fue reclutado después de que, acompañando a Jonathan Salas Avilés, el Fantasma, acudió a una comida con el Chapo, en Mazatlán.

El Fantasma y el Cóndor, según el testigo, se conocían debido a que ambos fueron militares. El Fantasma fue detenido por el Ejército en noviembre de 2015, en la sindicatura de Costa Rica, en Culiacán y está recluido en Almoloya de Juárez.

En una declaración de 2014, otro de los testigos mencionó que conocía al Cóndor desde hacía aproximadamente 12 años, y que en ese tiempo que lo conoció era escolta personal del Chapo Guzmán y que lo observaba en todas las ocasiones que veía al líder del Cártel de Sinaloa.

Un testigo diverso manifestó que recordaba que Hoo Ramírez enseñaba a la gente que andaba con el Chapo a tirar y “a moverse entre la sierra en donde estaban los campamentos porque corría, rodaba y hacía “machincuepas”, que él los entrenaba, porque hasta donde sabía el testigo, el quejoso era militar”.

Los testigos refirieron que el Cóndor era la “sombra” del Chapo y andaba con él en varios lugares, como Los Cabos, Obregón, Culiacán, Mazatlán, Puerto Peñasco, Durango y Guadalajara.

Además, lo ubican como el mandadero del Chapo y quién pasaba sus recados y ordenaba que se hicieran depósitos a las esposas de este último; y como el enlace entre el Chapo y Dámaso López Núñez, el Licenciado, quien era el encargado de conservar y buscar la relación con autoridades locales, estatales y municipales, arreglándose con ellos.

De acuerdo con las testimoniales, los tres años previos a la detención estuvieron viviendo en Culiacán y que lo único que hacían era rotarse en varias casas, pues todas se encontraban conectadas con un sistema de escape subterráneo.

Señalaron que “sobornaban a corporaciones policiacas, con el fin de que la misma (organización delictiva) no tuviera obstáculo en la plaza y así poder realizar libremente sus actividades delictivas, en el caso, la realización de acciones relacionadas con delitos contra la salud”.

El Cóndor negó ser secretario particular del Chapo y aseguró que es mentira que los elementos de la Marina lo vieron armado en los condominios Miramar ya que él se encontraba dormido.

Negó haberles apuntado con un arma a los agentes ya que no tuvo oportunidad de tomarlas al momento en que lo detuvieron.

Durante el proceso penal la Fiscalía presentó un oficio del director regional adjunto de la Administración para el Control de Drogas en el que informa que tiene una investigación activa en contra de Hoo Ramírez.

El informe de la detención detalla que alrededor de las 6:40 horas del 22 de febrero de 2014, elementos de la Marina realizaban funciones en el combate en contra la delincuencia organizada, y al ir circulando por el edificio Miramar un hombre les hizo el alto por lo que detuvieron la marcha y les informó que minutos antes había ingresado a la torre de condominios y en el interior había una persona armada paseando.

Ante esa información y aunado a que se contaba con datos de que en ese edificio se encontraba el Chapo Guzmán, por información obtenida en los diferentes aseguramientos que se en días previos se habían realizado en Culiacán, procedieron a ingresar, señala.

Al legar al cuarto piso, indica, en el pasillo encontraron a un hombre, que resultó ser Hoo Ramírez, con un arma larga en las manos y un marino le gritó “Armada de México, tire el arma” y el sujeto les apuntó y entró corriendo a uno de los departamentos por lo que iniciaron una persecución.

El hombre fue alcanzado en la sala del departamento donde tiró el arma y dijo “me doy, no hay problema” y ahí fue detenido y aseguraron un fusil calibre 5.56 milímetros con un aditamento lanzagranadas calibre 40 milímetros.

Al inspeccionar el departamento, abunda el informe, de las habitaciones salió el Chapo y fue capturado; y en el mismo departamento localizaron a tres mujeres adultas y dos menores de edad que se negaron a dar sus datos.

Los detenidos señalaron que las mujeres y las niñas no tenían nada que ver con las armas por lo que no fueron detenidas, indica el informe.

Hoo Ramírez fue trasladado a las instalaciones de la entonces Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, de la Procuraduría General de la República en la Ciudad de México y recluido en el Centro Federal de Readaptación Social número 1, el Altiplano, donde actualmente se encuentra recluido.

El pasado 19 de junio el Tribunal Colegiado confirmó la sentencia por delincuencia organizada que terminará de cumplir el próximo año.

Artículo publicado el 30 de julio de 2023 en la edición 1070 del semanario Ríodoce.